Que no cuenten con Ciudadanos (Cs) para operaciones políticas de apuntalamiento de opciones nacionalistas. No pierdan el tiempo. Las directrices que emanan de Albert Rivera y su equipo no ofrecen margen a la duda: a los nacionalismos, ni agua. Benjamín Perdomo, el consejero de Cs en el Cabildo Insular ya se había impregnado del ideario de su partido cuando, un buen día, Coalición Canaria (CC), hizo gala de su proverbial aptitud para quemar puentes al arremeter contra el consejero del partido naranja.
En junio pasado, Coalición anunció que solicitaría la comparecencia de Benjamín Perdomo para que explicara “su intención de cobrar del Consorcio del Agua más de 13 millones de euros por el uso de una finca rústica valorada en 1.525 euros”. CC señaló que, en el caso de prosperar la “demanda de Perdomo, podría desabastecer de agua a dicha población”. Todo mentira. Ese día, el joven político supo cómo se las gastan en CC y, desde ese día, se ganaron su desconfianza para siempre jamás. Si los nacionalistas saben que no pueden contar con Cs, de Benjamín saben que se las tiene jurada por sus malas artes.
La postura de Cs en el Cabildo ha ido aumentando el tono crítico hacia el grupo de gobierno
Así podría resumirse la posición de Cs ante la crisis que afecta al Cabildo Insular tras la salida del Partido Socialista (PSOE) del grupo de gobierno. De hecho, la postura política de Cs en el Cabildo ha ido aumentando el tono crítico hacia el grupo de gobierno, sobre todo a raíz de episodios como la pérdida del pleito de la Cueva de los Verdes, la incautación de la desaladora de Club Lanzarote y sus consecuencias penales, o, más recientemente, la huelga de los trabajadores de los Centros Turísticos.
En relación con este último asunto, Cs es uno de los grupos de la oposición firmantes del pleno extraordinario del Cabildo que el presidente se niega a convocar. Por ello, Cs ha exigido a Pedro San Ginés, que “sea valiente y deje por una vez la arrogancia a un lado, y convoque urgentemente el pleno extraordinario”, con el fin de “aprobar la propuesta de la oposición negociada con el comité de huelga de los Centros”.
Cs no es partidario de mezclar el Ayuntamiento de Arrecife con el Cabildo
Pedro San Ginés no cuenta con el voto de Benjamín Perdomo y la única operación a la que éste podría sumarse es al derrocamiento del presidente. No obstante, Cs plantea ir despacito y abordando las cosas de una en una. Así, por ejemplo, no es partidario de mezclar el Ayuntamiento de Arrecife con el Cabildo. Primero se arregla el Cabildo, dicen, y luego hablamos de otras cosas. Por arreglar entienden la formación de una nueva mayoría, una responsabilidad que, desde su punto de vista, deben liderar los socialistas porque son la fuerza mayoritaria de la oposición. Cs, en todo caso, aguarda acontecimientos, sabedores de que no son imprescindibles para que se produzcan nuevas mayorías, llegado el caso.
Cs lleva tres años trabajando “con el fin de ofrecer al ciudadano de la isla un nuevo espacio político que represente los valores de unidad, consenso y desarrollo de Lanzarote”. El partido de Rivera cree y defiende los principios de “liberalismo progresista y socialismo democrático, dos ejes que vertebran las sociedades avanzadas europeas”. Esta formación cree, además, que Lanzarote necesita “un nuevo rumbo, sin renunciar a nuestro pasado pero adaptándonos a las nuevas necesidades de una sociedad avanzada”. En las elecciones de mayo 2015, Cs obtuvo 2.400 votos al Cabildo y un acta de consejero. Pocos meses después, en las dos citas de las generales logró en ambas 6.000 votos al Congreso de los Diputados.
