Top Secret, 17 de julio de 2017

La dichosa avenida

La dichosa avenida
Antológico ejercicio de memoria el realizado este fin de semana en biosferadigital.com con respecto a la dichosa Avenida de Arrecife. La de gente que ha salido retratada. En realidad tampoco hace tanto de aquel miércoles, 9 de septiembre de 2014. Ese día, Apple presentó la nueva versión del iPhone, iPhone 6 y iOS8. En Chile se lamentaban de los efectos de un atentado terrorista  en el municipio santiaguino de Las Condes, que dejó 14 heridos. Marin Cilic, derrotado este domingo por Federer en Wimbledon, ganaba su primer (y único) Gran Slam. Concretamente el Abierto de Estados Unidos. Y Soria (el ministro mentiroso) estaba dándolo todo ofreciendo ser puerta de entrada del gas de EEUU a Europa. Mientras todo esto sucedía en varias partes del mundo, en el Archivo Municipal de Arrecife comparecían en rueda de prensa el  entonces alcalde, Manuel Fajardo Feo (CC), el Teniente de Alcalde, Rafael Juan González (CC), la consejera de Comercio del Cabildo, Rocío Arredondo (PSOE) y la redactora del Plan Director , la arquitecta Juana Guadalupe. Lo que ocurrió desde ese momento a hoy queda perfectamente reflejado en esta crónica en la que se pone de manifiesto que si la ciudad avanzara tan rápido como el cambio de opinión de algunos, hoy Arrecife estaría en el siglo XXIII.
 
El tranquilo lago de La Santa
Parece que no ha terminado la amenaza que pende sobre el tranquilo lago de La Santa. Hace unos años se presentó el proyecto Volcano Wake que, básicamente, pretendía transformar ese apacible lugar en una bulliciosa atracción que se conoce con el nombre de cable ski. ¿Qué es eso? Eso, desde el punto de vista de la instalación que se requiere, es una torre de unos 10 metros y varias de entre cuatro y seis metros de altura. Cables de acero entre unas y otras y con engranaje de un sistema de cable similar al de los utilizados en esquí de montaña, los denominados telesquí o telearrastres, en los cuales la cuerda y el mango del esquiador son arrastrados por un cable de accionamiento eléctrico. Pero como hacer esquí acuático arrastrado por cables en lugar de lanchas, per se, debe ser poco excitante, en este tipo de instalaciones suelen poner música "chunta chunta" (o reguetón, en su defecto), de tal manera que se pueda escuchar sin necesidad de aguzar el oído desde el Lago de La Santa hasta la puerta de la ermita de Los Dolores. Naturalmente para que eso funcione (sea rentable, queremos decir) los volcano wakes esos precisarán cerrar acuerdos con centenares de guaguas para trasladar hordas de turistas hasta el tranquilo lago de La Santa que, evidentemente, dejará de ser tranquilo. Parece que este escenario (el del barullo, el chunta chunta, los guirichonis y las inevitables cervezas por toneladas) les pone a los de Costas, al PP y a Ciudadanos, al decir del alcalde de Tinajo, Suso Machín, de quién dicen que en un primer momento también le hizo tilín semejante ordinariez para un lago tan tranquilo.
 
La venganza de Ibarra
Los que pensaban que el presidente de la Autoridad Portuaria de Gran Canaria (y Fuerteventura, si se dejan ellos) Luis Ibarra se iba a conformar con la histórica bofetada de Lanzarote a sus prioridades, y la del grupo de coros y danzas empresariales que le hacen la ola, estaban bastante equivocados. Desde el momento en el que Madrid aflojó los 23 kilos para las obras en el Muelle de Los Mármoles, su cabecita canariona empezó a carburar a ver de qué manera le daba la vuelta a la cuestión. Mientras lo pensaba, mandó a vociferar a un par de portavoces empresariales de Gran Canaria y a los diputados por esta provincia (es un decir) Pedro Quevedo, de Nueva Canarias y Meri Pita, de Podemos. Estos fueron los teloneros de su gran actuación: un Plan Director en el que deja para 2020 la inversión central de unas obras que pretende ir ejecutando hasta el 2023. Y mientras, en Madrid, el presidente de Puertos del Estado, José Llorca (PP), respira tranquilo porque ha desactivado la petición de la Autoridad Portuaria propia para Lanzarote. ¿O han oído ustedes algo de eso últimamente?

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