Cumbre nacionalista

El presidente del Partido Nacionalista Canario (PNC), Juan Manuel García Ramos, ha convocado una cumbre del nacionalismo canario de tono moderado, digamos el autonomista. El rojerío queda excluido. Lo hace ahora, que Coalición Canaria ha sido desbancada del poder, y no lo hizo hace nada, cuando Coalición ostentaba casi todo el poder. La pudo convocar hace dos o tres años, o seis o siete, cuando amplios segmentos de la población ya no podían aguantar más el mal gobierno nacionalista canario en materias tan sensibles como educación, sanidad, pobreza o territorio. Pero no, lo hace ahora y no parece que sea por razones ideológicas, programáticas o de gestión, sino para ver cómo se puede recuperar el poder de inmediato, antes de que se les disuelva la cosa. 
 
García Ramos quiere que la cumbre se celebre tras el verano, después de los Dolores, diríamos por aquí, y aspira a que acudan personas como Tomás Padrón, Antonio Castro Cordobés, Jesús Machín, José Carlos Mauricio, Manuel Hermoso, Mario Cabrera, Paulino Rivero, Ana Oramas, Fernando Clavijo, Ricardo Melchior, José Miguel Ruano, Román Rodríguez o Carmelo Ramírez. De Lanzarote no nombró a nadie, a saber si ha sido por olvido, si no le gusta Unidos por Lanzarote, si da por hecho que ya no hay nadie fuera de Coalición, como Lava o el PIL, o si le da cierto pudor citar a un histórico del ultra insularismo recalcitrante como Dimas Martín. Puede convocarlo, pero es improbable que acuda por razones de sobra conocidas, pero tambien podrían todos venir a visitarlo: la fotografía sería cojonuda. No hay nada como perder el poder para cerrar filas, compartir intereses comunes y ponerse las pilas.

Comentarios