Dolidos

Dolidos

Se duelen los gracioseros por la jarana de unos jóvenes en sus mismas narices confinadas; se duele la Educación en Canarias por quedar fuera de protocolos y vacía de despachos oficiales y se duele San Borondón, q.e.p.d. Por partes. La grabación de uno de esos vídeos a través de los que se promociona una determinada canción ha provocado un considerable mosqueo en Caleta de Sebo. Aunque más que el trabajo en sí, cómo con posterioridad los participantes llegados de fuera para la grabación se lo pasaron en grande hasta las tantas sin mascarillas, distancias de seguridad y otras imposiciones varias. Entienden que no hacía falta eso. Como el resto de los canarios, llevan dos meses en riguroso confinamiento, con sacrificios personales, familiares y laborales y, a la que pueden alongarse más allá de la puerta de sus casas, se encuentran reunidos en pocos metros cuadrados, todo aquello que les ha sido prohibido, pero multiplicado por mucho. “Será legal”, dicen, “pero no moral”.  

Educación

También se duele la Educación en Canarias. Ayer dimitió la consejera de Educación. El domingo, el director general de Ordenación. Los directores se sienten señalados, con toda la presión que ello conlleva y que, en un principio, no debe ir en el sueldo. En esta crisis sanitaria Ángel Víctor Torres ha perdido a los titulares de dos áreas extremadamente sensibles: Sanidad y Educación. En ambas ha arreglado el vacío de forma interina: cargando de más responsabilidad a otros miembros de su gobierno. No parece que sea la solución en dos sectores con mucho a mejorar. Sobre todo, en Educación. Da la sensación de que en Canarias se han establecidos de protocolo de desescalada para todo: para ir a los bares, para ir de tiendas, para ir a la playa, para pasear o hacer deporte…sin embargo a nadie se le ha ocurrido redactar uno para un regreso progresivo a las aulas. De eso se quejan, y con razón, los equipos directivos de los centros. Las familias ya ni digamos

La verdad

Y se duele también Jerónimo Robayna, que hace unos días anunció que a final de legislatura se terminaba San Borondón porque su asamblea así lo había decidido. Sin embargo, anoche enviaba un comunicado a los medios informando que ya ha solicitado formalmente la disolución del partido porque la asamblea se volvió a reunir y concluyó con que lo mejor es dejarlo ya. Es curioso que, en el partido más transparente del mundo, o casi, nunca haya trascendido ni una imagen de esa famosa asamblea y que tampoco se convoque a los medios para que inmortalice los momentos previos a la reunión. Y también es peculiar que no haya ni media declaración al respecto. ¿El argumento? “Consideramos que digamos lo que digamos cada uno sacará sus propias conclusiones y sus verdades a medias. Si hay alguien que conoce la verdad de san Borondón somos nosotros y queremos que quede así”. Pues hasta la vista, Jerónimo “Asamblea” Robayna