El 176
Pedro Quevedo y Nueva Canarias (NC) eran invisibles. Hasta ahora, cuando desde allá miraban hacia las islas, en el recuadro situado en la esquina inferior izquierda del mapa de España, pensaban en el singular, cuando no pintoresco, nacionalismo canario y, en el mejor de los casos, retenían el rostro de Ani Oramas y las siglas de CC. Ya no. De repente, Pedro Quevedo y NC han insuflado aire a Rajoy al permitir la tramitación y aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, doscientos y pico millones de euros y foto Mariano-Román mediantes.
Los focos se dirigen hacia el diputado 176, justo el que faltaba, tras adquirir tal condición dejándose ir pa’l pie sin perder la calma. La mano era larga. Si esperaban toparse con un diputado pesetero, flojito u oportunista, se han llevado un chasco, puesto que se han dado de bruces con un político experimentado y coñón, investido de lo mejor del sentido del humor grancanario. Y, de paso, allá han descubierto que hay dos nacionalismos en Canarias, y que este es de izquierdas. Los populares ya despliegan todos sus encantos pensando para hacer presidente a Antona en 2019.
Tanausú Lemes
