Top Secret, 16 de mayo de 2019

Gestión cultural

¡Qué mala suerte hemos tenido en Lanzarote con los consejeros de Cultura que mandamos a Canarias! O, mejor, ¡qué mala suerte está teniendo Canarias con los consejeros de Cultura que mandamos desde Lanzarote! Siga leyendo...

Gestión cultural

¡Qué mala suerte hemos tenido en Lanzarote con los consejeros de Cultura que mandamos a Canarias! O, mejor, ¡qué mala suerte está teniendo Canarias con los consejeros de Cultura que mandamos desde Lanzarote! Al actual, Isaac Castellano, le acaban de pintar la cara unas cuantas asociaciones y gestores culturales del Archipiélago. A la anterior, María Teresa Lorenzo, se le sublevó la audiencia noble del Festival de Música de Canarias y se llevó la talega llena de muy malas críticas por parte de la prensa especializada en cultura. Por la baja calidad de la programación y la poca afluencia de público. Y de la prensa especializada en economía. Por el lolailo en euros que costó la broma. La anterior de la anterior, Inés Rojas, dejó tan bajo el listón que ni se molestaron en criticarla. No hablaron de ella ni aunque fuera para mal. Durante un par de buenos años, la cultura en Canarias fue una especie de agujero negro. Pero negro oscuro, que diría mi vecino. Igual nos estamos pasando reclamando que nombren consejeros de Lanzarote en el Gobierno de Canarias, como si el mero hecho del lugar de procedencia te garantizara el éxito. Después de pasarnos media vida reclamando nombramientos, nos dedicamos la otra media a pedir perdón por haberlos reclamado.

El manifiesto

El caso es que a Isaac Castellano, el que posó ignorante de todo junto a una obra de César Manrique “retocada” sin permiso, un total de catorce asociaciones del Archipiélago le acaban de plantar en sus narices un manifiesto en el que proponen una política cultural "de nueva planta" en Canarias y que se declare la cultura como sector estratégico. De paso, han denunciado, el "progresivo abandono y desmantelamiento de los recursos y políticas culturales” de su Gobierno. Dicen los que saben, que esto ha convertido al sector en "más frágil y más vulnerable".  Dice el manifiesto: "Denunciamos públicamente la creciente vulnerabilidad económica y social a la que nos exponemos cientos de trabajadores en Canarias, derivada de la descomposición y abandono de las políticas públicas", y proponen cinco puntos que se centran en la "reconstrucción" de la Viceconsejería del Cultura y Deportes, "dotándola de una estructura, personal, medios y presupuesto adecuados", y poniendo especial atención a la formación, investigación, producción, distribución, exhibición e internacionalización y la conservación de los productos y proyectos culturales canarios.

Quiénes son

Los osados especialistas que se atreven a cuestionar las políticas culturales del departamento de Isaac Castellano no son nada desconocidas. Empezando por auténticas instituciones como el Ateneo de La Laguna, pasando por el Círculo de Bellas Artes de Tenerife y, a partir de ahí, FECED Federación Estatal de Compañías y Empresas de Danza, Asociación de Cineastas de Canarias Microclima, Solar, Acción Cultural, PiedeBase Asociación de artistas del movimiento de Canarias,  Asociación cultural Equipo Para, Asociación Cultural Keroxen, Fundación Pedro García Cabrera, Asociación de Profesionales de la Gestión Cultural de Canarias, Réplica Asociación de Empresas de Artes Escénicas de Canarias, Centro de la Cultura Popular Canaria, Asociación Cultural Fuentellano y Asociación Cultural Tenerife Shorts. En conjunto, estas catorce asociaciones representan a más de 1.500 personas, profesionales y empresas. Los firmantes afirman que el Gobierno de Canarias "carece de una política cultural definida que se traduzca en herramientas eficaces, en presupuestos consolidados y en criterios técnicos especializados y ajustados a las necesidades reales del sector". Además, cuando ejecuta acciones como la convocatoria de patrocinio por retorno publicitario, "solo entiende la cultura como un mero evento o espectáculo". Por todo ello, hacen un llamamiento a la unión y la movilización del resto de la sociedad, "animando al conjunto de la ciudadanía a acompañarnos en estas reivindicaciones".

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