Top Secret, 9 de febrero de 2018

Hacer aguas

Hacer aguas
Ustedes qué dirían. ¿Quién hace más aguas? ¿La carpa del 'recinto ferial' o el grupo de gobierno de Arrecife que se hace el muerto para que no les digan? Nosotros lo tenemos claro... Hay empate técnico. Está claro que la cosa esa donde Arrecife organiza actos en un descampado que llaman recinto ferial los que nunca en su vida han visto un recinto ferial, es una absoluta vergüenza. Y quienes permiten que ahí se hagan cosas y luego callan y ni se disculpan tras maltratar a la población, son otra vergüenza. Lo vivido estos carnavales bajo esa carpa cochambrosa impropia de una ciudad del tercer mundo (y teóricamente estamos en una del primer mundo y en pleno siglo XXI) vuelve a retratar a la 'pandi' que gobierna Arrecife. Un auténtico chaparrón es lo que caía mientras se celebraba la tercera fase del concurso de murgas. La gente no sabía dónde meterse. Al tiempo, el piso se llenaba de agua enchumbando no sólo el calzado de los ciudadanos, sino mojando cables de sonido, de imagen, eléctricos... Si a esa hora pasa por ahí cualquier auditor de riesgos laborales le mete un puro al concejal de Festejos que le quita la caraja en un cero coma. Pero el edil de lo lolailo ni siente ni padece. Se hace el muerto para que no lo vean. Por no abrir la boca ni la abre para pedir disculpas por el mal rato que hizo pasar a todo el mundo. Parece que lo estemos oyendo “¡no, si va a ser culpa mía que llueva!”.
 
El liderazgo
Y no, en realidad no es culpa suya que llueva, claro. Pero en una situación más que advertida (llevábamos en alerta desde principios de la semana) quizá el ayuntamiento debería haber previsto que algo así podía pasar. No basta con comprobar que el escenario y los lugares de privilegio donde se sientan los concejales son 'en seco'. Las imágenes que han recorrido las redes sociales estas últimas horas son un bochorno pero de los grandes. De esos de explicarles a los hipotéticos turistas que han creído que tenemos un gran carnaval que era broma todo cuanto vieron en Fitur o donde fuera. Los grupos carnavaleros, las gentes que participan en el Carnaval están muy, pero muy por encima de los (malos) organizadores. Y encima los maltratan. Pero como dicen que siempre hay que buscarle el lado bueno a las cosas, es de esperar que hayamos tocado fondo. Que a partir de ahora sólo se puede mejorar. ¿Cómo? Apostando por la construcción, ya en serio, de un auténtico Recinto Ferial, con posibilidades de celebrar actos al aire libre (el carnaval de las murgas debe ser así) y bajo cubierto. Para otros actos y planes 'B' varios. Y mandar la carpa a remendar. No sin antes agradecer los muchos servicios prestados a tantos grupos de gobierno miopes.
 
El Plan
El chorreo que la Consejería de Política Territorial del Gobierno de Canarias y la Cámara de Comercio le están pegando al ayuntamiento de Arrecife a cuenta del borrador del Plan General es histórico. Y la institución, diríase que huérfana de liderazgo, sólo puede lamentarse: “es un grosero desprecio”, han dicho. Se refieren a que el ente cameral está liderando una serie de reuniones de los técnicos de Gesplan con representantes de los partidos políticos y de la prensa. Sin ir más lejos, en la agenda de ayer: periodistas, PP, Vecinos Unidos y Ciudadanos (por lo menos).  En todo esto hay, mínimo, dos cosas ciertas: la Consejería de Política Territorial del Gobierno de Canarias, por respeto institucional, debía haber priorizado en el ayuntamiento de Arrecife la coordinación de esas explicaciones (que igual lo hicieron y les pillaron de Carnaval, ojo). Y el ayuntamiento de Arrecife tenía que haber iniciado esa ronda de reuniones desde el minuto uno. Que el Plan lleva ya un rato largo en las gavetas municipales. Ahora sólo quedan, de nuevo, los lamentos: “es que nos hemos enterado por la prensa”, “es que ha llovido mucho”, “es que”, “es que”, “es que...”.  ¡Pónganse en su sitio, que son el ayuntamiento de la tercera Capital de Canarias!

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