Inocente

Inocente

El ex presidente de Canarias y Senador por la Comunidad Autónoma, Fernando Clavijo, de Coalición Canaria, es inocente de los delitos de los que venía siendo acusado en el llamado Caso Grúas. Y eso también es noticia.  Y debe ser tratada con idéntico despliegue a cuando se publicó su calidad de imputado. Y lo bueno sería que la audiencia la recibiera con la misma intensidad como asimiló la denuncia. Sería lo suyo. Conviene todo este preámbulo habida cuenta de que ya han empezado a surgir los primeros papafritas con la famosa pregunta del “Y ahora, ¿qué?” y los no menos famosos “juicios paralelos”. ¿Ahora qué? Pues ahora se dice lo dicho, se publica lo publicado y, acto seguido, a ver cuál es la siguiente noticia en editar. Es decir, a otra cosa, mariposa. El magistrado de la Sala II del Tribunal Supremo Eduardo de Porres Ortiz de Urbina define “juicio paralelo" como el conjunto “de informaciones y el seguimiento que hacen los medios de comunicación social de un hecho sometido a investigación o enjuiciamiento judicial efectuándose una valoración ética y jurídica de la conducta de las personas implicadas de forma que los medios de comunicación ante la opinión pública ejercen el papel de juez, fiscal y abogado defensor, según los casos. La valoración del asunto discurre paralela al proceso, utilizando sesgada y parcialmente la información que deriva del proceso judicial”.

Para lelos

El mismo magistrado señala que “no puede pretenderse que en una sociedad libre la información sobre asuntos judiciales se suspenda hasta que los tribunales dicten sentencia”, para añadir a continuación que, sin embargo, “se filtran actuaciones secretas, se publican informaciones parciales, manipuladas o falsas para desprestigiar a algún litigante o, en su expresión más acabada, se interroga a partes, testigos, peritos de forma paralela al proceso para dar una versión interesada o parcial del conflicto o para condicionar la decisión del tribunal”. Este digital ha publicado menos de cinco noticias sobre el Caso Grúas, incluyendo una entrevista al propio Clavijo en la que él se expresaba sobre el particular. Considerando los años que han pasado desde que empezó la instrucción del asunto archivado por el Supremo, no se puede decir exactamente que lo de los juicios paralelos vaya con nosotros.

Gobierno

Hay en todo esto, sin embargo, otra cuestión de peso. Y es que Fernando Clavijo no es hoy presidente de Canarias, o vicepresidente en el peor de los casos, como consecuencia de su imputación judicial. Conviene recordar cómo Ciudadanos se plantó siguiendo al dedillo su código interno de no saltarse determinadas líneas rojas. Una de ellas, gobernar con imputados. Fernando Clavijo dijo ayer, en una rueda de prensa convocada con carácter de urgencia, tal era la prisa por desahogarse, que "El auto calla bocas e insinuaciones de los que han querido dañar a CC". Cobra especial relevancia que subraye lo de Coalición Canaria -se da por hecho que a él querían dañarlo, según su teoría- porque los nacionalistas tienen un Congreso que ha quedado congelado por la pandemia. Clavijo nunca ocultó sus aspiraciones a seguir liderando el partido. Los que habían hecho otros planes, tienen ahora un problema.