La Cueva de los líos

El desenlace a todo el lío que se montó con la reclamación de la Cueva de Los Verdes amenaza con derivar... en otro lío. Que a nadie extrañe: somos especialistas en estas lides. Fue el ex alcalde de Haría, José Torres Stinga, quien empezó lo que pronto fue un quilombo de notables proporciones. Entre su forma de gestionar la reclamación de la Cueva de Los Verdes ante el Cabildo, y que ahí presidía (y preside) otro fuerte carácter, ni cinco minutos tardó en producirse el desencuentro. Era, de paso, o quizá sobre todo, un pulso interno en Coalición Canaria, en el que acabó pesando más Pedro San Ginés que Torres Stinga, que fue expedientado e inhabilitado para ser candidato al Ayuntamiento de Haría. En su lugar pusieron a un hombre “de partido” (y que cada cual interprete eso como mejor le parezca): Marci Acuña. Con un pleito judicial en marcha, se intentó aminorar la tensión, y se logró, y se trató de parar la vía de la justicia... y eso no ha acabado de producirse. Hay sentencia firme y tres versiones distintas (como siempre, una sola verdad, a saber cuál). En el Cabildo aseguran que se ha archivado. En Haría, depende de a quien le pregunten. El teniente de alcalde, José Pérez Dorta, que la paciencia ha caducado y que pedirán la ejecución de la sentencia, que condena al Cabildo a pagar 18 kilos a Haría.

 

Pérez Dorta dijo más. En Radio Lanzarote, donde se han intercambiado los mensajes, anunció que no solo iban a pedir la ejecución de la sentencia, sino que también iniciarían los trámites para intentar anular el convenio que se había acordado entre las partes, ya que solo estaba avalado por un informe externo y no contaba con informes de Intervención ni de técnicos del Ayuntamiento. Digamos que son palabras poco dadas a la interpretación, pero que han sido interpretadas. El alcalde y socio de Pérez Dorta, Marci Acuña, dijo ayer en la misma tribuna que no hay tomada una decisión al respecto de pedir la ejecución de la sentencia. Y que no iba a hablar mucho más para no enredar las cosas. Sin embargo en un momento u otro tendrán que ser claros y, si no en aras de la transparencia debida, sí que por estrategia política les conviene que esa claridad se dé cuanto antes. El mes de mayo de 2019, fecha de las próximas elecciones, se aproxima a gran velocidad y a los habitantes de Haría les gustará saber qué pasa con lo suyo. Igual que al conjunto de la isla también le conviene conocer qué ha de ocurrir con la pasta del Cabildo, que es de todos. 

 

Dicho esto, nos vamos de Semana Santa. El lunes, más.