Opinión

Las opciones de CC

La actual legislatura autonómica se acerca, a toda velocidad, a su recta final. Entre los incendios, la llegada descontrolada de migrantes a nuestras costas, la pandemia y la erupción volcánica en La Palma, los meses y años vuelan casi si darnos cuenta. Si Ángel Victor Torres no decide disolver antes el Parlamento y convocar elecciones anticipadas, en mayo del 2023 estamos llamados a votar a nuestros ayuntamientos, cabildos y Parlamento de Canarias.

Los principales partidos están diseñando sus estrategias para llegar en las mejores condiciones a la cita con las urnas, y prácticamente todos los movimientos que hacen tienen como objetivo conservar u obtener posiciones en las Instituciones. La principal baza que los partidos estatales utilizarán para encarar las próximas elecciones será la unidad interna. 

Sin duda, el Partido Popular refrendará en su próximo congreso regional la unidad que  ya escenificaron en su reciente convención nacional. También el Partido Socialista Canario; tanto en su reciente congreso federal –celebrado la pasada semana en Valencia– como en el ámbito de Canarias los socialistas han cerrado filas entorno a Pedro Sánchez y al líder del PSOE canario y presidente del Gobierno, Ángel Victor Torres.

Más allá de los aciertos u errores que socialistas y populares estén cometiendo en sus respectivas tareas de gobierno u oposición, la generosidad que han exhibido para presentarse ante la sociedad canaria como organizaciones unidas y fuertes les otorga un valor añadido ante los ciudadanos.

Sin embargo, los nacionalistas canarios dedican sus esfuerzos a escenificar la división interna y la incompatibilidad de los unos con los otros. Se impone el egoísmo personalista, dejando en segundo plano el interés de Canarias.

En el ámbito del Estado crecen los movimientos políticos territoriales, que cada vez remarcan con mayor énfasis la diversidad de los pueblos que lo constituyen. El clima general de la política española está propiciando el fortalecimiento de los partidos nacionalistas o territoriales.

Hay que repetirlo muchas veces, Canarias es el territorio más singular de los que constituyen el Estado. La sentencia la dicta la geografía. Nuestra posición en la encrucijada entre tres continentes marca unas singularidades que no tiene ningún otro territorio del Estado. Así lo reconoce la mismísima Unión Europea, singularidades que se evidencian, entre otros factores, en el agua, la energía, el suelo, los transportes, la escasez de materias primas, la vulnerabilidad de nuestras costas, la dependencia del turismo, los problemas de nuestra agricultura e industria, la falta de oportunidades para nuestros creadores o las dificultades para acceder a los centros de formación  europeos.

Hasta ahora, el liderazgo de una fuerza nacionalista en Canarias con influencia en Madrid  ha favorecido la atención del gobierno español de turno a nuestras singularidades. Afortunadamente, las matemáticas han colocado en la presente legislatura a una fuerza nacionalista -Nueva Canarias- en el área de influencia del Gobierno de las Islas y con un voto de oro en el Congreso de los Diputados. En los preparativos de las estrategias de las diferentes formaciones políticas para encarar los retos electorales del 2023, Coalición Canaria, principal fuerza de obediencia canaria, puede abordarlos desde dos opciones. Puede CC aspirar a ser un mero apéndice de PSOE o PP, rebajando sus aspiraciones a la meta de ocupar algunas parcelas de poder en el Gobierno de Canarias. Es una opción, pero hay otra. Puede Coalición Canaria, como Canarias necesita, impulsar y liderar un proyecto de unificación del nacionalismo canario que permita recuperar la dirección de un Gobierno sin subordinación en las Islas. 

Comentarios