PPPSOE y mucha lejía
Tiembla Canarias, y no hay ningún seísmo en marcha. Los temblores que notamos son los de las piernas de los que viven cómodamente instalados a la sombra del paraguas de Coalición Canaria y ven como una amenaza la posibilidad de que el PP y el PSOE pacten en el Archipiélago. Aunque remota, si esta opción cuajara haría falta además mucha lejía para limpiar a fondo todos los rincones de la administración pública canaria y sus amplios y variados tentáculos.
Primero fue Ángel Víctor Torres quien, al comparecer para valorar los resultados electorales, volvió a insistir en el mismo mensaje de campaña: Canarias exige un cambio que se concreta en que el PSOE presida el Gobierno regional y que Coalición pase a la oposición. Descartado como socio Coalición, el problema es que la aritmética es muy tozuda y los números parece que no alcanzan con las fuerzas progresistas, aunque sí con el PP: justo los 36 diputados que se necesitan.
El eterno imposible acuerdo entre socialistas y populares cobra cuerpo por primera vez
Ángel Víctor compareció con las cuentas hechas y el exacto cálculo del reparto del poder entre ambos partidos en los Cabildos Insulares y las principales ciudades canarias, y hay mucho por repartir, siempre y cuando se descabalgue a Coalición. Pero, lo interesante es que, un rato después, Asier Antona se presentó ante los medios con el mismo mensaje y reiterando lo que había dejado caer en campaña: que en el PP están hasta los mismísimos de Coalición.
Asier quiere disuadir a CC de que preste su apoyo a la investidura Sánchez con sus dos diputadas en el Congreso, y ha anunciado que tiene vía libre para explorar un acuerdo con el PSOE y que espera la llamada de Torres. Justo en este momento empezamos a notar los temblores, justo en el instante en que el eterno imposible acuerdo entre socialistas y populares cobra cuerpo por primera vez en casi treinta años. La posibilidad es muy lejana, pero la necesidad es tan imperiosa que corren riesgo de agotarse las existencias de lejía en Canarias.
