CASO STRATVS

Tercera jornada del juicio Stratvs con las declaraciones del empresario Juan Francisco Rosa

En la tercera jornada del juicio Stratvs ha declarado el empresario y promotor de la bodega Juan Francisco Rosa, quien reconoció que se construyó más de lo autorizado y sostiene que se trata de una restauración.

Tercera jornada del juicio Stratvs con las declaraciones del empresario Juan Francisco Rosa

Hoy ha sido el tercer día del juicio del ‘caso Stratvs’, en la Sala Sexta de la Audiencia de Las Palmas, en Arrecife. Fue el turno para declarar del empresario Juan Francisco Rosa, para quien el Fiscal solicita la mayor pena en este proceso con 15 años de prisión, petición que la acusación popular eleva a 20 años por varios delitos urbanísticos y contra el medio ambiente.

Juan Francisco Rosa, promotor de la bodega Stratvs, reconoció ante la Audiencia Provincial, que la construcción de las obras se inició antes de presentar el proyecto de ejecución en el Ayuntamiento. En lo que respecta a si todo lo construido fue lo autorizado, Juan Francisco Rosa admitió también que “fue un poco más, concretamente unos 500 metros”, coincidiendo en ambos casos con lo manifestado por el arquitecto Miguel Ángel Armas Matallana en la sesión anterior del juicio oral.

El interrogatorio de la Fiscalía también puso especial interés en saber si para Rosa, del mismo modo que para el arquitecto Miguel Ángel Armas Matallana, se trata de una restauración y no de una sustitución de la vivienda. Juan Francisco sostuvo que "no se trata de una vivienda nueva, sino restaurada. Era una vivienda en ruinas, todo un desastre". Sin embargo, no negó haber construido algo más de lo acordado.

A las palabras de la fiscal recordando que “se prohibía la ampliación de la vivienda en la autorización de suelo rústico”, Rosa expuso que lo que amplió con esos 500 metros de más, está completamente enterrado y no ha supuesto ningún problema”.

En relación a las solicitudes de permiso para la construcción, el empresario aseguró que “Miguel Ángel me dijo que sería su mujer, Piedad, quien presentase la solicitud de licencia y que sería el quien se encargaría del proyecto”. Ante la afirmación de Juan Francisco alegando que era Piedad la promotora, la fiscalía pregunta que si la mujer tenía constancia de que era Rosa quien estaba actuando en su nombre. “A ella la veo muy poco, es con Miguel Ángel con quien hablaba”, respondió Rosa.

Viajando a los inicios de esta construcción, Juan Francisco Rosa aclaró que hasta el año 98 solo poseía el 4% de la finca. “Compré el 4% de la finca a la familia de Armas, después fue cuando adquirí también el porcentaje de Miguel Ángel y su mujer, por eso, entre los tres obtuvimos casi el 100% de la finca”, declaró el empresario. Con respecto a la dimensión restante, que era un 18% y pertenecía a otros familiares de apellido Negrín, aclara que también se la compró a ellos. Sin embargo, la fiscal, con el fin de aclarar si las obras fueron o no ejecutadas en terrenos que no eran en ese momento de su propiedad, puntualizó “la compra a la familia Negrín no se materializó legalmente hasta el pasado 2018 y las obras comenzaron antes”. A lo que Rosa responde que la compra “fue de palabra y que nadie le reclamó nada”.

La fiscalía también cuestionó a Rosa, quien viviendo en Lanzarote y presumiendo de conocer la isla tan bien, como el mismo declaró, haya realizado dichas obras sobre lo que se considera un espacio protegido. “No recuerdo que fuese así, para eso están los técnicos, yo solo se que me concedieron una licencia, y por eso lo hice”, añadió el empresario.

En su interrogatorio, la fiscalía trató también de demostrar que Juan Francisco Rosa, en su declaración de obra nueva en construcción, mintió acerca de la ubicación de las obras, ubicándolas en una finca cuando, en realidad, están en otra. Al respecto, el empresario  admitió,  “he sabido que se cometió un error con la ubicación de la bodega almacén, pero con la restauración de la casa nunca hubo ningún inconveniente”.  Además de decir que “desconocía que el uso del suelo era exclusivamente agrícola”.

El juicio oral continuará el día once de febrero en Arrecife, con la declaración de testigos propuestos por las distintas partes personadas en el proceso.

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