Un desprecio para reflexionar

Hace algunas semanas se conocían los distinguidos con los Premios de Canarias, el máximo galardón que concede la Comunidad Autónoma a sus ciudadanos. Ni una sola mujer en la terna. Entonces se supo que, históricamente, los Premios han ninguneado a la mujer canaria. Lo dejamos plasmado aquí mismo: en la historia de los Premios se han concedido galardones a un total de 82 hombres, 25 entidades (que pueden tener, o no, mujeres en su seno) y sólo 6 mujeres. Un vergonzante desequilibrio. Quizá por las críticas que entonces recorrieron medios de comunicación pero, sobre todo, redes sociales (a este Gobierno le preocupan más los bares que las bibliotecas), en la lista de Medallas de Oro de Canarias (segundo escalafón de las distinciones del 30 de mayo), el gabinete de Fernando Clavijo estimó conceder una de ellas a un tal Movimiento Feminista de Canarias que no existe como tal y que, por tanto, no hay cara que ponerle. ¡Claro que hay lucha feminista en Canarias y colectivos que la llevan a cabo! Pero no se aglutinan vajo un “Movimiento” único, federado, confederado, asociado o como quieran ponerle. Dos meses después de la decisión, los colectivos integrados en la Red Feminista de Gran Canaria y en la Plataforma Feminista 8M de Tenerife han acordado no recoger la Medalla. Entienden que premiar al «movimiento» no solo es algo «muy difuso», sino un «auténtico despropósito», según recogía este sábado el diario Canarias7.

 

¿A qué, por tanto, conceder la Medalla a un ente abstracto? Las asociaciones citadas lo tienen claro:  se trata de un «gesto de cara a la galería» y con fines «absolutamente electoralistas». Y lo afirman con semejante contundencia por cuanto el Gobierno de Canarias no ha destacado, precisamente, por llevar a cabo políticas que vayan en consonancia con las demandas de los colectivos feministas de las Islas. Perfectamente se podría haber dado lo que les comentábamos antes. Si reciben críticas por ignorar a las mujeres en los Premios Canarias, hasta el punto de que destacados intelectuales de las islas los han tildado de machistas, la manera de desmentirlo, habrán pensado, es darles la Medalla de Oro al feminismo, así, en general. Y quedamos como reyes. Pero el tiro les ha salido por la culata, cosa bastante previsible, por otra parte. El desprecio que han mostrado algunas voces del feminismo canario por el proceder de este Gobierno les ha de hacer reflexionar (al Gobierno, claro). La sociedad hace tiempo que ha cambiado. El viejo populismo sirve cada vez menos. 

 

La Agrupación Socialista por Lanzarote, el partido político gestado a raíz de la última escisión del PSOE insular ya tiene fecha para su puesta de largo. Será el jueves de esta semana, a las siete de la tarde, en la Asociación de Mayores de Amigos de la Tercera Edad de Altavista. ¡Ah, qué lejos quedan aquellos tiempos en los que los nuevos partidos se presentaban en flamantes salones de hoteles multiestrellados! Sin desmerecer el lugar donde ASL se presentará oficialmente, por supuesto. De hecho puede que la formación que preside Pablo Eugenio Reyes (Pablo, el Peluquero, como se le conoce popularmente) arranque en loor de multitudes. Un local de pensionistas, a las siete de la tarde, tiene que estar petado de gente jugando al dominó o al chinchón. No pasa nada por interrumpir la partida media horita para escuchar a los que vienen a hacer nuevas políticas desde una formación de progreso y bla, bla y más bla. Un par de aplausos, refresquitos, chocolate y churros y a por el 2019, que son dos días.