CULTURA

Museo Tanit, donde habitan las tradiciones y costumbres lanzaroteñas

Museo Tanit, San Bartolomé. Imagen de archivo. Foto JL Carrasco.
Museo Etnográfico Tanit, San Bartolomé. Imagen de archivo. Foto JL Carrasco.

Fundado por José Ferrer y Remedios Quintana, se alza en una casona tradicional situada en un espacio central de la localidad de San Bartolomé

Museo Tanit, donde habitan las tradiciones y costumbres lanzaroteñas

El Museo Agrícola El Patio no se sobrepuso a la crisis económica ocasionada por la pandemia y se vio obligado a cerrar sus puertas. Desde entonces, el Museo Etnográfico Tanit se ha erigido en el lugar donde habitan las tradiciones y costumbres lanzaroteñas. El símbolo Tanit es un grabado del Pozo de la Cruz, en San Marcial de Rubicón, y deja entrever la vocación del museo por vincularse con la historia de la isla. Tanit es una simbolización de una diosa cartaginense, protectora del amor, la fortuna y la fecundidad.

Situado en la localidad de Tiagua, el Museo Agrícola El Patio recreaba fielmente la vida tradicional del campo y mostraba la arquitectura popular y la vivienda rural del pasado. Con el transcurso del tiempo, se convirtió en un centro de difusión de las tradiciones isleñas, pues guardaba y exhibía la rica cultura del campo de Lanzarote, un valioso patrimonio agrario creado a lo largo de los siglos.

Camino de cumplir 25 años de vida

La Familia Barreto Caamaño promovió El Patio, que abrió sus puertas en 1996, tras varios años de ingente trabajo y de una importante inversión privada. Fue un magnífico ejemplo que demostraba que la iniciativa privada podía convivir en armonía con el interés general. La iniciativa partió del desaparecido doctor José María Barreto Feo. No obstante, su trayectoria y su labor son dignas de elogio, a pesar de que ya no es posible disfrutar de este valioso recurso cultural, educativo y turístico tan interesante para la isla.

Sin desmerecer algunas iniciativas de recopilación que están a la espera de poder exhibirse con criterios museísticos, alguna vinculada a la cultura del mar en Arrecife, la tarea de salvaguarda de las tradiciones y costumbres locales recae ahora, casi en exclusiva, en el Museo Etnográfico Tanit. Fundado por José Ferrer Perdomo y Remedios Quintana Reyes, se alza en una casona tradicional canaria situada en un lugar central de la localidad de San Bartolomé, junto a la plaza León y Castillo.

Este equipamiento cultural fue inaugurado en 2000 con la misión de conservar y difundir el patrimonio etnográfico lanzaroteño. Tanit ha sido designado Centro de Interés Turístico y Cultural por el Cabildo de Lanzarote y va camino de cumplir 25 años de vida. Las instalaciones del museo se encuentran en una de las primeras bodegas de la isla y en una antigua casona del siglo XVIII. En su interior se exhibe una muestra de los bienes y enseres utilizados por nuestros antepasados, que constituyen una variada y rica manifestación de su vida social, laboral y religiosa.

En la bodega originaria de alza el Museo

Al recorrer sus instalaciones se produce una inmersión en la historia cotidiana de los habitantes de Lanzarote y su folklore: usos, costumbres, ídolos, utensilios de trabajo y cotidianos, vestimentas y todo lo relacionado con un pueblo ingenioso que tuvo que luchar para sobrevivir al viento, la falta de agua y la acción destructiva de los volcanes. La propuesta expositiva se desarrolla en un envolvente aroma de malvasía que desprende una bodega de más de 300 años de antigüedad.

Museo Etnográfico Tanit. I
Museo Etnográfico Tanit.

En la bodega originaria se encuentra el museo, propiamente dicho, en donde los antiguos tanques de vino han sido transformados en expositores. El conjunto museístico cuenta con sala de exhibiciones, la Sala de los Mahos con muestras fósiles, grabados, cerámicas… una capilla, tienda de artesanía y cafetería con terraza y pista para bailes tradicionales. Corona el espacio una huerta.

El Museo Etnográfico Tanit es una institución comprometida con la salvaguarda del legado tradicional de los que nos han precedido. Aquí, la iniciativa privada muestra un gran entusiasmo y vigor en el campo de la etnografía, exponiendo y describiendo las tradiciones y costumbres de la isla vinculadas, sobre todo, a la cultura del campo. Un gran trabajo el realizado por sus promotores, quienes, con cariño, desvelos, mantienen viva parte de la memoria colectiva de Lanzarote.

Comentarios