De residuos a recursos: el proyecto circular de los CACT para fines sociales
Vázquez: “Es una oportunidad para la reinserción de personas vulnerables que despierta sensibilidades alrededor de la sostenibilidad de los ecosistemas y contribuye a la protección de nuestros paisajes”
¿Qué hacemos con los residuos que generamos en este territorio tan limitado?, ¿qué salidas puede tener un palet, una botella de plástico o una lata de conservas, más allá de acabar en el vertedero o arrinconado en cualquier paisaje de la isla?, ¿dónde acaba el plástico que, empujado por el viento, recorre perdido y sin rumbo esta pequeña extensión de terreno?
A estas y a otras muchas cuestiones parecidas trata de dar respuesta ‘CACT, residuos y reinserción´, un proyecto de economía circular puesto en marcha por los Centros de Arte, Cultura y Turismo, con el respaldo del grupo empresarial Chacón, la asociación Papacría y Derecho y Justicia, que proporciona una segunda vida a los desechos que genera la actividad diaria en los Centros Turísticos como palets, botellas de cristal, cartón o plásticos a través del reciclaje.
Metodología de un proyecto que es “mucho más” que una idea brillante
José Goñi, profesional con amplia experiencia en reciclado artístico y responsable del proyecto, ha impartido un programa formativo en el Centro de Inserción Social Ángel Guerra. A lo largo de varias sesiones, un grupo de sesenta internos del Centro Penitenciario de Tahíche adquirió conocimientos teóricos y comenzó a transformar los residuos que se generan en los Centros Turísticos en obras con un fuerte componente social y ambiental.
Entre las transformaciones más llamativas destaca la reutilización del cartón que, en unos casos, da vida a archivadores y carpetas de uso interno, y en otros sustituye al papel burbuja en el embalaje de productos. Así se cierra un circuito que reduce residuos, elimina plásticos de un solo uso y ofrece una nueva oportunidad de vida a los recursos dentro de la propia organización.
En las tiendas de los Centros Turísticos desde hoy
Después de meses de aprendizaje, trabajo y producción, hoy se ha presentado en Jameos del Agua el resultado de una iniciativa que “es mucho más que una idea brillante”, ha asegurado el consejero de la Entidad, Ángel Vázquez. “Es una oportunidad para la reinserción de personas en situación de vulnerabilidad que despierta sensibilidades alrededor de la sostenibilidad de los ecosistemas y contribuye a la protección de nuestros paisajes”.
Expositores, bolsos, souvenir de distintos tipos, embalaje para botellas, bisutería y objetos de artesanía son solo algunos de los productos que se pueden adquirir desde hoy en la red de tiendas de los Centros Turísticos. Los beneficios que se obtengan de la venta se destinarán al proyecto.
Acompañado por Carlos Armas, en representación del grupo Chacón, Tharais Armas, de Derecho y Justicia y José Goñi, de Papacría, alma mater del proyecto, Vázquez pudo disfrutar del “trabajo, la pericia y el buen hacer de quienes han participado en una iniciativa social que quiere hacer la vida más amable a las personas y ofrecer una oportunidad al planeta”. En la visita estuvieron presentes, además, la Subdirectora de Seguridad, la Educadora Social y la Jurista del Centro Penitenciario de Tahíche.
´CACT, residuos y reinserción´ pretende, además, prevenir la reincidencia; contribuir a la disminución de vulnerabilidad socio familiar a la que se enfrenta la población que finaliza su condena y sus familias, y favorecer el descenso del consumo de adicciones durante el cumplimiento de las condenas posibilitando espacios de ocio y tiempo libre saludable..
“El taller es un momento de libertad”
Para muchos participantes, el taller ha sido un espacio de cambio y expresión. “Motivación”, dice uno. “Una pasada de ingenioso”, comenta otro. Otros lo definen como “creatividad e imaginación”, o simplemente “una manera de enriquecer lo que nadie quiere y de aprovechar el tiempo”. Hay quienes lo vinculan a “su aportación a la sostenibilidad de la isla”, y otros que lo definen como “Autorrecuperación”. Para algunos, fue “un momento de libertad”.
A la vista del resultado, el consejero de los Centros Turísticos se comprometió hoy a darle continuidad con una segunda edición.