FIESTAS

Playa Honda cierra un año más el calendario festivo del verano lanzaroteño

Avenida marítima de Playa Honda. (1)
Avenida marítima de Playa Honda.

Muy probablemente, es la localidad con mejor y mayor calidad de vida de Lanzarote, el lugar en el que muchas personas desearían residir

Playa Honda cierra un año más el calendario festivo del verano lanzaroteño

Las fiestas Playa Honda comienzan este sábado, día 16 de septiembre, bajo el sello oficial de fiestas de fin de verano, no solo en San Bartolomé, sino en toda la isla, ofertando un amplio y variado programa dirigido a todas las edades e intereses. Hace años que Playa Honda organiza el penúltimo festejo del municipio de San Bartolomé, ya que el último se lo reserva La Aguapata, en el Diseminado de El Islote.

Por tanto, hace años que la isla adquirió la costumbre de despedir el período estival con las fiestas de Playa Honda, a finales de septiembre. Al principio, no era más que un encuentro organizado por jóvenes veraneantes que se despedían de Playa Honda hasta el año siguiente. Hoy se han convertido en las fiestas más bulliciosas de San Bartolomé.

La gran urbe del municipio

Playa Honda es hoy el núcleo más poblado del municipio con casi 10.400 residentes, lo que supone más de la mitad de la población censada en San Bartolomé. Es un montón de gente, sobre todo si se tiene en cuenta que el casco de San Bartolomé apenas supera los 6.000 habitantes y el conjunto del municipio ronda los 19.000.

Por tanto, esta es la gran urbe del municipio, pero no es el único caso en la isla que el pueblo de cabecera y sede administrativa del municipio ha quedado empequeñecido ante el empuje de nuevos núcleos. Lo mismo sucede en Haría con Punta Mujeres y Arrieta, en Teguise con Costa Teguise, en Tías con Puerto del Carmen y en Yaiza con Playa Blanca. Estos vecinos y vecinas son los que deciden, en gran medida, quiénes son sus alcaldes y alcaldesas en las elecciones municipales.

Zona comercial abierta en la calle Mayor

En un principio, esta pujante localidad parecía condenada a convertirse en un simple asentamiento dormitorio, pero, hoy día, cuenta con un tejido comercial diverso, colegio, instituto de enseñanza media, restaurantes, bares y cafeterías, una avenida marítima peatonal que la recorre en toda su longitud, unas playas magníficas y buenas conexiones a través del transporte público. Además, tienen un centro de salud, farmacias, centro cívico, guardería…

Uno de los mayores logros de Playa Honda en los últimos años ha sido disponer de una zona comercial abierta en la calle Mayor, reconvertida ahora en un espacio comercial con preferencia peatonal al restringirse el tráfico de vehículos. Como siempre sucede en estos casos, la pacificación del tráfico generó una falsa polémica que, injustamente, sufrieron anteriores grupos de gobierno y de la que no queda ni rastro. La calle Mayor se ha convertido en un espacio concurrido y exitoso.

Las fiestas de Playa Honda se parecen cada vez más a lo que son en realidad, una celebración de fin de verano y laica, ya que la festividad de Santa Elena tiene lugar en agosto, es estrictamente religiosa y carece del arraigo y la popularidad de la celebración civil de esta localidad. Son, además, las fiestas de la que, muy probablemente, es el núcleo con mejor y mayor calidad de vida de Lanzarote, el sitio en el que muchas personas desearían residir.

Cuarto núcleo de población de la isla

No ha pasado mucho tiempo desde que Sebastián Díaz Ferrer, su esposa, Fermina García Santana, e hijos edificaron algunas viviendas en lo que hoy es la confluencia de la vía original de acceso, la calle Princesa Ico, con la Avenida de las Playas, sentando las bases del incipiente crecimiento urbano de la localidad. Así lo constató Facundo Perdomo Rodríguez (1922-2012), Cronista Oficial de San Bartolomé.
El reducido grupo de casas aisladas asentadas en las orillas del municipio de los años sesenta del siglo pasado se ha convertido en el cuarto núcleo de población de la isla. Por su clima, su ubicación y sus playas, Playa Honda fue el lugar escogido para residir por los naturales y los llegados de otros lugares, hasta conformar la comunidad diversa y abierta en que se ha convertido.
Sobre el origen del nombre de la localidad parece que no hay dudas. Mas, antes de la existencia del aeropuerto y del desarrollo urbano, este espacio no era más que un lugar costero de suelos arenosos. Aquí venía a morir el gran río de jable que se inicia en Caleta de Famara y atraviesa la isla de norte a sur, a veces con una anchura superior a los cinco kilómetros, formando cada vez menos dunas hasta perderse en el mar justo en este lugar de la costa de sotavento.

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