Agricultores, ganaderos, queseros y pescadores reclaman impulsar el sector primario

Los agricultores, ganaderos, queseros y pescadores de Lanzarote y La Graciosa reclaman una intervención decidida de todas las administraciones públicas —insular, autonómica o estatal—, cada una en su respectivo ámbito competencial, que permita el desarrollo del sector primario, dado su carácter estratégico para la diversificación de la economía y para aumentar nuestros niveles de soberanía y seguridad alimentaria. La presidenta del Cabildo de Lanzarote, Mª Dolores Corujo, mantuvo hace unos días una intensa reunión con agricultores, ganaderos y pescadores para abordar las demandas del sector, así como las principales líneas estratégicas de cara al futuro. Al encuentro acudieron varias entidades que, en su conjunto, representan a la práctica totalidad del sector primario de Lanzarote y La Graciosa y engloban a más de dos mil productores.

 

La presidenta señaló que “hoy más que nunca, las administraciones públicas debemos ser capaces de aunar esfuerzos y resolver, en la medida de nuestras competencias, las principales demandas del sector primario, vital para el presente y el futuro de Lanzarote, y que arrastra problemas enquistados desde hace décadas, como puede ser el desabastecimiento de agua”. Ellos lo tienen claro. El auge del turismo provocó una pérdida sustancial de nuestro grado de autoabastecimiento y, a la par, una excesiva dependencia del exterior en cuanto al suministro de alimentos. Consideran que la diversificación de la economía se debe afrontar de forma urgente, empezando por impulsar y potenciar el sector primario en las islas de Lanzarote y La Graciosa, para lo cual han presentado sus propuestas.  

 

Riego agrícola. Es urgente solucionar el problema del agua, ya que hoy en día el suministro para riego agrícola con agua de calidad no llega a muchas zonas de cultivo y en otras lo tienen limitado a un solo día a la semana. Ello impide que se materialicen las pocas iniciativas de relevo generacional que se presenta en el agro insular. Así, proponen la ejecución de las obras contempladas en el Plan Hidrológico Insular, la construcción de la desaladora para riego agrícola proyectada en la costa de Tinajo, estudiar la viabilidad de una desaladora en la costa de Mala-Guatiza, la ejecución de las obras de encauzamiento del Barranco El Hurón, así como la construcción del Tanque-Tormenta en su cauce y la rehabilitación de los recursos hidráulicos existentes, como la presa de Mala, aljibes, maretas, pozos, nateros… para hacer frente a los periodos de sequía. 

 

Cultivo de la viña. El cultivo de la viña es el que más contribuye a mantener el paisaje como atractivo turístico, y, como ya se hace con otros cultivos, se propone abaratar los costes explotación para que, a su vez, pueda ser atrayente para los jóvenes agricultores dedicarse a este cultivo. Pero, la viña sigue teniendo una ayuda que para ser cobrada en su totalidad, siempre con evidente retraso, se tiene que acudir al auxilio del estado. En concreto, plantean un aumento las ayudas hasta alcanzar los 4.500 euros/hectárea.

 

Registro Vitícola. En los últimos ejercicios se está denegando la ayuda al mantenimiento de la viña a un número importante de viticultores de toda Canarias por un problema burocrático con el Registro Vitícola, que, en modo alguno, es imputable a los viticultores. Este problema se solventaría con la modificación del decreto que lo regula en los términos que permita como medio de inscripción en dicho registro la declaración responsable del explotador de la finca, emitida ante los diferentes Consejos Reguladores de las Denominaciones de Origen de Canarias.

 

Comercialización local. Se propone el establecimiento de un incremento de 20 céntimos por kilogramo en las ayudas a percibir por los diferentes agricultores de las islas no capitalinas, para lograr un mayor equilibrio en cuanto a costes de producción entre los agricultores de todas las islas y para que se pueda obtener una similar rentabilidad. Esta demanda tiene que ver con la ayuda a la comercialización local de frutas, hortalizas, raíces y tubérculos alimenticios recogida en el POSEI, y con ello se compensarían los costes de la doble insularidad.

 

Ayuda a la batata. Actualmente, está fijada esta ayuda a la comercialización de la batata en 90 euros o 180 euros la tonelada, dependiendo si el productor actúa a título individual o está integrado en una OPFH. La superficie y producción declarada en la campaña 2017 se fijó en 886.128,81 kilos y 55.760,41 euros, pero, a los efectos de poder recuperar un cultivo que en el pasado tuvo una gran importancia en Lanzarote, es necesario que se cambie de grupo a la batata y se la englobe en la letra E.

 

Cultivo de la cochinilla. Este cultivo es importante por su contribución a la formación de paisaje. Hoy en día existe un colectivo de jóvenes que están apostando por la recuperación del cultivo, al punto que se ha conseguido la Denominación de Origen Cochinilla de Canarias. Pero, para apoyar su desarrollo y conseguir una rentabilidad mínima que posibilite la recuperación de la cochinilla, se precisa dar una salida al stock existente. Así, reclaman un estudio sobre la viabilidad económica de la transformación y  comercialización de la cochinilla en ácido carmínico, dar salida al importante stock almacenado por los agricultores de Mala y Guatiza, estudiar las propiedades medicinales y nutricionales de la tunera a los efectos de mejorar su aprovechamiento comercial, fijar la contrapartida económica a la superficie en 6.000 euros/hectárea en el POSEI y establecer la ayuda agroambiental para el mantenimiento de fincas dedicadas al cultivo de la cochinilla en 2.000 euros/hectárea en el P.D.R.