Ayudas

Ayudas

A estas alturas del calendario ya no quedan universitarios en la isla. Excepción hecha de los que estudian aquí o desde aquí. Ello supone que a multitud de familias se les acumulan los problemas ya que a situaciones laborales en precario o inexistentes se le añade el colosal desembolso económico que entraña mandar un hijo -o más- a la Universidad.  En pocos ámbitos como en este se pone de manifiesto la distinta velocidad a la que circula el Archipiélago. Y lo poco que eso parece importar a los mayoritarios de Gran Canaria y Tenerife. Los hijos de ambas islas no padecen este problema ya que, en las dos y por aquello del exquisito equilibrio interinsular -interinsular de sí mismas- la una y la otra disponen de Universidad. La decana, La Laguna, y la muy luchada por el lobby canarión de la época, ULPGC. Al resto de islas de Canarias, aquel pulso nos dio exactamente igual y en nada nos ha beneficiado: tenemos las facultades igual de lejos, lo mismo de caras y parece que no vamos a mejor en cuanto a los niveles de ayudas por parte de las instituciones, en teoría, encargadas de corregir las desigualdades sociales en los territorios

Rivero

Decimos en teoría porque no parece que estén haciendo el esfuerzo suficiente. Con alguna excepción que luego señalaremos. Hace unos años, siendo Paulino Rivero presidente de Canarias, un periodista le inquirió acerca de esta cuestión: ¿Procurará su Gobierno que a un estudiante de Lanzarote le cueste lo mismo el acceso a la Universidad que a otro de Gran Canaria o Tenerife? Tras varios minutos de palabras huecas por parte del gobernante y de insistencia del periodista, Rivero espetó una frase antológica: “Los estudios universitarios no forman parte de la enseñanza obligatoria”. Un modo nada disimulado de decir que el que no tenga y no pueda, que se jeringue. Y cambiemos de tema, pibe. Es mentira que el político canario, bien sea de Gran Canaria, bien de Tenerife, tenga a Canarias en su cabeza. Su isla, la otra para que no se quejen y punto. Ni conocen la realidad de las otras seis ni falta que parece hacerles. Y esto no cambiará hasta que no presida Canarias un hombre, o una mujer, nacidos y criados en islas no capitalinas.

Instituciones

Y que sea capaz, como es natural. Mientras, a confiar en las ayudas al transporte. Y a que lleguen en tiempo y forma. O, simplemente, a que las haya para llegar a percibirlas algún mes de estos. En la isla sólo Teguise se esfuerza para que las familias recuperen parte del desembolso en el menor tiempo posible. O quizá sería más propio significar que sólo ese ayuntamiento logra que el esfuerzo que se hace cristalice en un breve espacio temporal. Es de suponer que todas las instituciones se esfuerzan. Está por ver lo que hará el Gobierno de Canarias este curso académico, pero si nos preparamos para lo peor, todo eso que nos ahorramos cuando nos caiga el disgusto definitivo. Eso dice la oposición, al menos. En su web, Canarias se quedó en las ayudas para el periodo comprendido entre el 1 de agosto de 2019 y el 31 de julio de 2020. Cuesta imaginar que, en medio de la feroz crisis económica provocada por los efectos de la pandemia, haya gobiernos -de izquierda- que dejen tirados a sus estudiantes. Y otro día discutimos si son justas o no este tipo de ayudas que ponen a todos en el mismo nivel, independientemente de la renta de cada cual