Balance de las siete pateras del domingo: 273 migrantes, entre ellos 18 mujeres y tres bebés

Migrantes este domingo en Lanzarote.
Cuatro de las embarcaciones eran trasladadas al muelle de Órzola, dos llegaban a La Graciosa y otra desembarcaba en Punta Mujeres
 
Balance de las siete pateras del domingo: 273 migrantes, entre ellos 18 mujeres y tres bebés

Un total de 273 migrantes han llegado este domingo a Lanzarote a bordo de siete embarcaciones, entre ellas, una neumática. Cuatro de las pateras eran remolcadas tanto por la patrullera de la Guardia Civil como por Salvamar hasta el muelle de Órzola, mientras que dos lo hacían hasta La Graciosa y otra desembarcaba por sus propios medios en Punta Mujeres, en Haría. Siete pateras que se unen a las ocho llegadas el pasado sábado con unas 200 personas.
 
En las cuatro pateras de este domingo llevadas hasta Órzola viajaban 148 personas, entre ellas, 140 varones, tres mujeres y cinco menores.
 
En la patera que llegaba a la playa del Alambra en La Graciosa lo hacían 33 personas, entre ellas, una mujer.  Tres de los ocupantes tuvieron que recibir asistencia médica.
 
De madrugada llegaba a Punta Mujeres otra patera con 45 migrantes, entre ellos, cinco menores. Una de las personas tuvo que ser evacuada al hospital Molina Orosa.
 
Los efectivos de Emerlan rescataba una neumática en aguas de La Graciosa con 44 personas de origen subsahariano. Entre ellos viajaban 24 varones, 14 mujeres, tres menores y tres bebés.
 

 

Críticas de Nueva Canarias por la falta de medios

Nueva Canarias Lanzarote expresa su preocupación por la llegada en estos últimos días de nuevas embarcaciones con inmigración irregular. Este fin de semana han arribado 13 pateras con más 300 personas sólo en Lanzarote. 
 
Los canaristas, que el jueves pasado realizaron una charla-coloquio con expertos titulada “La inmigración irregular. Retos para una política humanitaria” (ver aquí), consideran que en la isla de Lanzarote se dan unas circunstancias excepcionales con respecto a las demás islas que obliga a realizar políticas específicas. Concretamente, se refieren al análisis que ha realizado Txema Santana, periodista y experto en inmigración: más del 50% de las pateras con destino Lanzarote tocan tierra, incrementando el riesgo de naufragios como los vividos en Órzola. El Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) sigue inoperativo. El origen de los inmigrantes se ubica en zonas del norte y sur de Marruecos, en una travesía que dura entre 2 a 5 días. Llegan mayor número menores no acompañados que en el resto de islas. Y carece de un Centro de Atención Temprana (CATE) para albergar, de media, a más de 30 personas al día (datos del mes de septiembre). 
 
Este análisis es compartido en su totalidad por Daisy Villalba, Trabajadora Social con una dilatada experiencia en el tratamiento de la inmigración irregular, que exige una “intervención urgente y planificada” con el fin de “mejorar tanto las condiciones de las personas que llegan, como la labor que realizan los servicios de emergencias, sanitarios, policías y voluntariado”. Villalba, que en la actualidad es miembro de NC Lanzarote, comenta que “la sensación que tenemos en la isla es de caos. Las instalaciones no mantienen unos mínimos de salubridad; el personal sanitario está colapsado; y los policías no tienen capacidad para custodiar a los inmigrantes. Una situación que se está complicando cada día”. 
 
NC ve urgente activar una comisión interadministrativa con las administraciones locales (Ayuntamientos y Cabildo Insular), Gobierno de Canarias, Gobierno de España y la UE. “Lo que es inadmisible es que las administraciones, cada una en su grado de responsabilidad, se laven las manos”, expone Villalba. “La pelota se la van pasando y, conscientes o no, la situación se está desbordando”, apostilla. 
 
Para NC la vida de las personas es lo primero. “Ante todo, debemos tratarlos con dignidad y respeto. Para ello, es fundamental un CATE que nos ayude a mantener un cierto orden”, comentan desde la organización. De la misma forma, exponen que se está manteniendo contactos a todos los niveles para paliar la situación de forma inmediata con el objetivo de derivar a los inmigrantes tanto a centros de otras islas como a la península. Apelan a la solidaridad de las diferentes Comunidades Autónomas y a los Estados miembros europeos, que deben tener, también, su grado de responsabilidad. 

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