Los trabajadores no pueden plantear una lucha como la de los Centros
Canal Gestión, la huelga invisible del agua
La empresa ha desactivado de antemano los efectos de la huelga apelando a que el agua es un bien de primera necesidad.
Los trabajadores de Canal Gestión Lanzarote están en huelga. Pero como si no lo estuvieran, ya que es una huelga invisible. Su lucha no es perceptible porque los servicios mínimos establecidos son de tales proporciones que los puestos de trabajo se están cubriendo prácticamente el cien por cien para garantizar el suministro de agua potable. Es decir, la empresa ha desactivado los efectos de la huelga de antemano apelando a que el agua es un bien de primera necesidad, a pesar de las protestas del Comité de Huelga.
Los huelguistas se encuentran atrapados en un grave dilema, ya que, de una parte, quisieran plantar cara a Canal Gestión con todas sus consecuencias en defensa de sus reivindicaciones, pero, de otra, son conscientes de que el sector del agua no admite una huelga general como la que acaeció en los Centros Turísticos. Una huelga general como la de los Centros conllevaría cortes en el suministro o severas restricciones en el abastecimiento, algo que afectaría a la población residente, pero no a los turistas. Desde el primer día se pondrían a la ciudadanía en contra, por lo que no pueden ni plantearse una medidas de fuerza de tal magnitud.
Los 69 trabajadores fueron contratados después de que Canal se hiciera con la concesión
Los trabajadores afectados son 69. Todos ellos fueron contratados después de que Canal Gestión se hiciera con la concesión del servicio de agua en Lanzarote: producción, distribución y depuración. Por lo tanto, los trabajadores antiguos que formaban parte de la empresa pública Inalsa, y que fueron absorbidos por Canal, tienen garantizada la seguridad de sus puestos de trabajo, lo cual no les ha impedido solidarizarse con sus compañeros.
Como es sabido, los 69 trabajadores fueron contratados “en fraude de ley”, según los sindicatos, el Comité de Huelga y la Inspección de Trabajo, por lo que deberían convertirse en trabajadores con “contratos indefinidos”. La empresa no acepta este enfoque y los está despidiendo a medida que concluyen los contratos de trabajo por obra o servicio y, sobre la marcha, los despedidos, media docena hasta ahora, están demandando a Canal ante la justicia, que será la que resuelva.
Los aproximadamente doscientos trabajadores de Canal Gestión recibieron el apoyo explícito de los grupos políticos representados en el pleno del Cabildo Insular, en su penúltima sesión ordinaria. El pasado jueves volvieron a concentrarse pacíficamente en la entrada a los aparcamientos de las oficinas centrales de la empresa, en Punta Grande, tratando de hacer visible su situación en defensa de los derechos de los trabajadores y en protesta por la vulneración de los derechos recogidos en el Convenio Colectivo y de los acuerdos firmados.
