DÍA DEL DONANTE
Los canarios somos los donantes de órganos más generosos del mundo

El archipiélago canario alcanzó una tasa de 50,6 donantes de órganos y tejidos por millón de población durante año pasado.
Cada 1 de junio se conmemora el Día del Donante de Órganos y Tejidos en todo el Estado. Esta fecha fue instaurada con el propósito de incentivar en todas las personas que se conviertan en donantes y así salvar la vida de otras menos afortunadas. Donar un órgano es donar vida, como muy bien saben los trasplantados y las mismas personas y las familias que, generosamente, donan órganos. España aspira alcanzar los 50 donantes por millón de población y superar los 5.500 trasplantes antes de 2022. Canarias ya superó esa meta el año pasado y alcanzó una tasa de 50,6 donantes por millón de población.
En efecto, los canarios son los donantes de órganos más generosos del mundo. España es, con diferencia, el país líder del mundo en donaciones de órganos y tejidos, con 48,9 donantes por millón de población en 2019, pero Canarias la superó con 50,6. Para no variar, el Servicio Canario de la Salud (SCS) registró el año pasado un nuevo récord en donaciones, lo que permitió a sus centros realizar 183 trasplantes de riñón, hígado, páncreas, así como uno de corazón, procedentes de 120 donantes.
El 10 por ciento de los receptores fallecen mientras esperan recibir un órgano
Pero, a pesar de las relativamente altas cifras de donantes en las Islas y lejos de proclamar el triunfalismo, las autoridades sanitarias subrayan la necesidad de profundizar en la donación. Cuantos más donantes, más trasplantes y más vida, ya que aproximadamente el 10 por ciento de los receptores fallecen mientras esperan recibir un órgano. Para ello es esencial desarrollar actividades de formación orientadas a los profesionales que atienden a pacientes que pueden convertirse en potenciales donantes.
Para promover la donación altruista de órganos y tejidos se creó en el país la Organización Nacional de Trasplantes, un ente público encargado de los asuntos relacionados con trasplantes. Su único fin es que el ciudadano que necesite un trasplante tenga las mayores y mejores posibilidades de conseguirlo. A esta entidad se le atribuye el éxito del reconocido modelo español de trasplante, recomendado por la Organización Mundial de la Salud y que se está aplicando en diferentes partes del mundo con resultados muy similares.
La donación y el trasplante se encuentran regulados por ley
La donación y el trasplante se encuentran regulados por una Ley que garantiza, entre otros, dos aspectos fundamentales. En primer lugar, el altruismo de la donación, ya que nadie puede donar ni recibir un trasplante con otras intenciones o medios que no sea la solidaridad altruista. Y, en segundo lugar, la equidad en el acceso al trasplante, puesto que todas las personas tenemos el mismo derecho y las mismas posibilidades de recibir un trasplante, independientemente de nuestro lugar de residencia o de cualquier otra coyuntura personal. Esto es así, porque existe una red estatal de coordinación sometida a rigurosos controles para verificar la igualdad de todos los ciudadanos.
Ahora bien, ¿quién tiene acceso a un trasplante? Pues las personas enfermas que sufren un daño irreversible en uno de sus órganos (hígado, corazón, pulmón, intestino, páncreas y riñón) y no pueden curarse con otro tipo de tratamiento médico. El trasplante es la única solución para evitar su muerte o para llevar una mejor calidad de vida. Con el fin de garantizar los principios de igualdad y equidad, los criterios se establecen teniendo en cuenta dos aspectos fundamentales: territoriales y clínicos. El equipo responsable decide, dentro de su lista de espera, qué paciente es el más indicado para recibir el órgano, siguiendo los criterios clínicos como compatibilidad del grupo sanguíneo, características antropométricas, la gravedad del paciente, etc.
Todos somos donantes, excepto si hay constancia escrita de lo contrario
Tras la donación le sigue el trasplante, que consiste en sustituir un órgano o tejido enfermo por otro que funcione adecuadamente. Hoy en día, constituye una técnica médica muy desarrollada que logra magníficos resultados para los receptores. No obstante, necesita obligatoriamente la existencia de donantes, ya que sin la solidaridad de estos no hay trasplantes. Según nuestra legislación todos somos donantes, excepto si hay constancia escrita de lo contrario.
No obstante, a la hora de decidir, las comisiones de trasplantes de los hospitales son muy respetuosas con la decisión de las familias. Por eso, es tan importante que seamos capaces de trasmitir a nuestro entorno más cercano lo que queremos que se haga con nuestro cuerpo. Lo aconsejable es que, en vida, manifestemos nuestro deseo con respecto a la donación de órganos. La familia, si es conocedora de la decisión del fallecido, tiende a respetar su voluntad. Finalmente, existen muchos tipos de tejidos que también se trasplantan para curar enfermedades, aunque son bastante menos conocidos que los trasplantes de órganos sólidos.