Hay dos formas de divorciarse: bien o mal
Divorciarse en Lanzarote, ni más ni menos que en otros sitios
01 de octubre de 2018 (17:16 h.)
La tasa de separación y divorcios está en 6,3 por cada diez habitantes, que es prácticamente la misma que registra el conjunto del Archipiélago.
“Ya no hay nada entre nosotros”, “Nuestra historia se acabó”, “Esto no da más de sí, “Ya no te aguanto”… Estas frases y otras por el estilo se dicen con relativa frecuencia, pero sólo una pareja se divorcia cada día en Lanzarote. Visto así, podría parecer que la isla le ha dado la espalda al amor para toda la vida, pero nada más lejos de la realidad.
En Lanzarote no hay ni más ni menos predilección por el divorcio que en el resto de Canarias. La tasa de separación y divorcios está en 6,3 por cada diez habitantes, que es prácticamente la misma que registra el conjunto del Archipiélago. La mitad de los divorcios se producen de mutuo acuerdo y en siete de cada diez casos las mujeres retienen la custodia de los hijos.
A partir de 2007 comenzó a disminuir la tasa de separación y divorcios, y algún iluso y mal informado se apresuró en proclamar el renacimiento del amor en la pareja. Pero no. Muchas parejas mal avenidas decidieron permanecer juntas durante los años duros de la crisis porque no podían permitirse el lujo de vivir por separado, sencillamente. Ahora que mejora la economía y aumenta el empleo, aunque lentamente, las y los que no aguantan más la convivencia vuelven a coger puerta.
Una de cada cuatro parejas se divorcia de mutuo acuerdo
España es el segundo país de la Unión Europea con mayor tasa de divorcios. Se produce uno cada cinco minutos, aproximadamente, aunque hay quien trata de quitar hierro al asunto argumentando que obedece a los más de cuarenta años durante los cuales el franquismo y la iglesia católica impidieron divorciarse a las y los españoles, quienes ahora se estarían desquitando.
Hay dos formas de divorciarse: bien o mal. A las buenas consiste en ponerse de acuerdo y echarle sentido común, sobre todo si hay hijos por medio. A las malas consiste en recurrir a la vía judicial procurando hacer el mayor daño posible a la ex pareja. En nuestro país predomina el sistema “a las buenas”, ya que una de cada cuatro parejas se divorcia de mutuo acuerdo y a través del divorcio exprés, un método rápido y barato.
El divorcio de mutuo acuerdo es un procedimiento rápido y muy sencillo
La duración media de las uniones en el país es de unos 16 años y las razones principales de las rupturas son la infidelidad, los problemas de comunicación, los celos, los trastornos de personalidad, los problemas económicos, familiares que se entrometen en la relación y las adicciones. En muchas ocasiones, existe una causa real que se denomina asimetría de poder, y tiene que ver con el hecho de que, con el paso del tiempo, las dos personas que integran una pareja se distancian porque no evolucionan de idéntica manera.
El divorcio de mutuo acuerdo es un procedimiento muy sencillo, ya que no hay que ir a juicio. Una vez presentada y admitida a trámite la demanda de divorcio de mutuo acuerdo, el secretario del juzgado cita a la pareja para que se ratifique en su petición de divorcio. Esto se hace por separado y luego el juez dicta la correspondiente sentencia, concediendo el divorcio y pronunciándose, llegado el caso, sobre el convenio regulador que regirá la relación entre ambos en el futuro.