Tiempo de truco o trato
Halloween, los niños prefieren divertirse con la muerte
La noche de Halloween, el día de brujas, rompe con la tradición española y aborda el fenómeno del miedo desde una perspectiva lúdica.
Hay costumbres importadas que han venido para quedarse. Por eso, no merece la pena luchar contra ciertas tradiciones en un mundo interconectado, sobre todo si apasiona a los niños. Es el caso de Halloween, una celebración que, aunque lleva poco tiempo entre nosotros, ha arrasado con el día de finaos o de difuntos en Canarias. ¿El motivo? Es muy divertido, así que no le des más vueltas.
El Halloween, también conocido como el día de brujas, es una celebración popular de culto a los muertos tradicional de los países anglosajones. Es una fiesta de origen pagano que se celebra la noche del 31 de octubre, víspera del día de todos los santos. Según la creencia, esa noche los espíritus de los difuntos caminaban entre los vivos, y se realizaban fiestas y ritos sagrados que incluían la comunicación con los muertos.
Divertirse con la idea de la muerte rompe con la cultura religiosa española
Hay personas que no ocultan su rechazo a Halloween porque lo consideran un producto de importación y poco respetuoso con el carácter luctuoso que debería presidir el recuerdo de difuntos, pero la realidad es que cada año cobra más fuerza y goza de mayor popularidad. Halloween lo peta.
La noche de Halloween aborda el fenómeno del miedo desde una perspectiva lúdica. Divertirse con la idea de la muerte rompe con la cultura religiosa española, que la ha presentado históricamente como algo a lo que hay que temer. Eso ayuda a su éxito, pero también hay razones más peregrinas, como el hecho de disfrazarse, algo que les encanta a los niños (y a los padres). Disfrazarse es para muchos la excusa perfecta para perder la vergüenza y, sobre todo, para pasar un buen rato en grupo. Cuando se es tímido, ponerse un disfraz y participar de la fiesta es mejor que ir a terapia con el psicólogo, ya que es una gran oportunidad para desinhibirse, ser otro y liberar tensiones. ¡Mano de santo!
Truco o trato es un ritual que, en esencia, ya se daba en algunas islas de Canarias
Hay otro argumento que es difícil de rebatir: la meteorología. Es en febrero o marzo, en invierno, cuando tienen lugar los Carnavales, y el frío o la lluvia no invitan a disfrazarse según de qué. Pero en octubre aun hay buen tiempo que invita a disfrutar del patio del colegio y de la calle enfundado en un buen disfraz. Por eso Halloween es visto como un buen sustituto del Carnaval cuando los niños son pequeños.
Halloween es, junto con el Carnaval, el acontecimiento en el que más personas coinciden en vestirse con máscaras y atuendos estrafalarios, siempre relacionados con el miedo, la muerte o el género de terror. Brujas, vampiros, diablos, momias, demonios, zombis, esqueletos, novia cadáver, la familia Addams… son algunos de los modelos más demandados por los niños, jóvenes y adultos. Tiempo de truco o trato. Un ritual que, en esencia, ya se daba en algunas islas de Canarias mucho antes de conocerse el fenómeno Halloween. “Al llegar el día, los más pequeños cogían una talega e iban visitando las casas pidiendo los santos. Tocaban en las puertas y preguntaban: ¿Hay santos? -preguntaban- La dueña decía que sí, depositando en la talega almendras, nueces, higos pasados y castañas. Cuando las llenaban, volvían a casa muy contentos”.
Consejos para un Halloween seguro
La Policía Nacional ha difundido una serie de sencillas pautas y recomendaciones de seguridad ante las inminentes celebraciones y fiestas asociadas a Halloween, entre otras:
Truco o trato siempre en pandilla
Si tus hijos y sus amigos van a pedir golosinas con el truco o trato, adviérteles de que deben hacerlo siempre en grupo. Fija con ellos una ruta y horario concretos y recuérdales que no deben entrar en ningún domicilio o coche de desconocidos. Si son muy pequeños, siempre deben ir acompañados de un adulto y recuerda ponerles alguna pulsera identificativa o anotar tu teléfono en la muñeca, en caso de que se despisten su localización será más fácil.
Si vas a beber, no cojas el coche
Si vas a celebrar la fiesta de Halloween, recuerda que no debes conducir bajo los efectos del alcohol, además de irresponsable y un riesgo para los demás y para ti mismo, es delito. Respeta a los conductores de guaguas, taxis, tranvías y otros servicios públicos, así como al resto de pasajeros.