ESPACIOS NATURALES
Islote de Halcones, un monumento natural en medio de un mar de lava
29 de febrero de 2020 (11:22 h.)
Hay más de veinte topónimos en Lanzarote que hacen referencia a estos curiosos accidentes geográficos situados en las zonas cubiertas por las coladas del XVIII.
Cuando por aquí se habla de islotes hay que detenerse a ver de qué se trata, ya que hay tres tipos en Lanzarote. Tenemos los Islotes situados al norte que conforman el Archipiélago Chinijo, los islotes e isletas situados en la marina de Arrecife o la costa de Tinajo y los pequeños oasis totalmente rodeados de lavas volcánicas. Entre estos últimos hay varios en Lanzarote, como el Islote de Halcones, declarado Monumento Natural por la legislación canaria de espacios naturales.
Hay más de veinte topónimos en Lanzarote que hacen referencia a estos curiosos accidentes geográficos, todos ellos situados en los municipios de Tinajo y Yaiza, y en las zonas cubiertas por las lavas originadas por las erupciones de Timanfaya acaecidas entre 1730 y 1736. Al encontrarse a mayor altitud que las coladas volcánicas recientes, fueron rodeados por estas y se conservaron intactas para usos agrícolas y/o ganaderos.
Han sido definidos como islas de roca antigua sobre un mar de lava más reciente
Este tipo de islotes de tierra adentro hacen referencia a un mínimo territorio de tierra útil rodeados de un mar de lava y por eso mismo son islotes. Han sido definidos como islas de roca antigua sobre un mar de lava más reciente. El Islote de Halcones se encuentra en Yaiza y dentro de los límites del Parque Nacional de Timanfaya y su acceso está restringido, por lo que sólo se puede visitar con la autorización del órgano gestor del Parque Nacional. Por eso mismo, es un espacio bastante inaccesible.
El Islote de Halcones es una estructura volcánica con una caldera en su interior, anterior a las emisiones de las coladas del siglo XVIII y se eleva hasta los 104 metros de altura. En definitiva, es un antiguo volcán dentro de un mar de lava más reciente y que ocupa una superficie de poco más de diez hectáreas. Posee una tonalidad rojiza, y presenta cierta forma de herradura en su estructura, debido a la gran erosión que ha sufrido una de sus laderas. Fue declarado como Monumento Natural en 1994 está catalogado como área de sensibilidad ecológica.
Conocido también como Montaña Halcones, esta atalaya es un lugar de gran importancia para el estudio de la biodiversidad, debido a que algunas especies vegetales que se encuentran aquí han seguido su evolución distinta al del resto del territorio, aisladas de cualquier influencia exterior. Lo mismo sucede en los demás islotes de tierra adentro y entre todo ellos se calcula que suman cerca de un centenar de especies distintas de animales y plantas.