Son básicos en la alimentación de la cabaña ganadera

Preocupación ante el fin de las ayudas REA para los forrajes y la alfalfa

Importadores de harinas destinadas a la alimentación de ganado piden dotar con 40.000.000 kilogramos adicionales el cupo sujeto al REA.

Importadores de harinas destinadas a la alimentación de la cabaña ganadera piden dotar con 40.000.000 kilogramos adicionales el cupo sujeto al Régimen Específico de Abastecimiento de las Islas Canarias (REA) hasta finales de año y para completar el actual ejercicio. Esta cantidad supone unos cinco meses de consumo. La petición está motivada por el agotamiento imprevisto de las ayudas REA para los forrajes y alfalfa deshidratada.
 
Los forrajes y la alfalfa deshidratada son básicos en la alimentación de la cabaña ganadera canaria, un sector especialmente sensible al alza de los precios. Si no se dota el cupo con la ampliación de las ayudas, se encarecerá la importación de estas fuentes alimentarias del ganado provocando una subida de los precios de los productos ganaderos.
 
Fuentes del sector se muestran sorprendidas porque el 25 de julio pasado existían 12.800.000 kilogramos disponibles para ser importados en el balance publicado. Es decir quedaba el 15% del cupo anual, y, sin embargo, una semana después, el día 1 de agosto, solamente quedaban 1.700.000 kilogramos disponibles, ósea un 2% del cupo total anual. Asimismo, se muestran preocupadas porque el actual sistema REA favorece a los importadores de las dos islas más pobladas de Canarias, que disponen de una gran capacidad de almacenamiento y, por consiguiente, disfrutan de una mayor capacidad de compra y de venta.
 
En años anteriores también se han producido acopios que contravienen la normativa REA
 
Ante esta situación, se producen acaparamientos de los cupos acogidos a las ayudas REA, siempre por parte de importadores radicados en alguna de las dos islas más pobladas, agotando los topes e imposibilitando acogerse al REA a los importadores de las islas menos pobladas. La consecuencia es que el actual sistema de ayudas REA, tal y como está configurado, beneficia el acaparamiento y la especulación, ya que cuando queda poco cupo los grandes importadores lo agotan forzando a los demás a comprarles al precio que  impongan.
 
A juicio de los importadores afectados, para revertir esta situación la Dirección General de Promoción Económica del Gobierno de Canarias tendría que publicar a diario la información sobre los cupos disponibles en su web. También sugieren investigar a las empresas que han ocasionado este agotamiento del cupo en los forrajes y alfalfa deshidratada, considerando que puede existir un mercado de oligopolio, desde esta fecha hasta la nueva campaña REA de 2018. Asimismo, proponen aplicar otros criterios diferentes a los actuales, de forma que todos los importadores tengan las mismas oportunidades para importar en Canarias forrajes con ayudas REA. Y, por último, solicitan aumentar los cupos de todos los productos sujetos al REA para las campañas 2018 y sucesivas.
 
En años anteriores ha ocurrido lo mismo con el forraje, los cereales y hasta con la mantequilla, produciéndose acopios que contravienen la normativa REA.

El REA, en dos palabras

El REA pretende garantizar el abastecimiento de las Islas Canarias de productos esenciales para el consumo humano, la transformación y la utilización como componentes agrícolas, con vistas a paliar los costes adicionales derivados de su lejanía y de su situación ultra periférica. Los productos que se benefician de este régimen de ayudas están limitados a las necesidades de abastecimiento, y se establece una lista de productos y un plan de previsiones que fija las necesidades anuales de abastecimiento.
 
Estas necesidades de abastecimiento se establecen todos los años mediante unos planes de previsiones donde se cuantifican las necesidades reales de productos destinados al consumidor final y para la industria. El objetivo principal de estos beneficios mediante la supresión de los derechos de importación o las ayudas directas para los productos Unión Europea, es que los productos tengan un menor coste y este menor coste tiene que repercutirse y alcanzar al usuario final.