EFEMÉRIDE
La primera exposición de César en Arrecife
Aquel mismo año de 1953, Manrique realiza un gran mural para la sala de viajeros del Aeropuerto de Guacimeta: una alegoría de la isla de Lanzarote.
Se cumplen 65 años de la primera exposición de César Manrique en Arrecife, inaugurada el 15 de noviembre 1953. La muestra se exhibió en los salones del Cabildo Insular, en la Calle Real, y contenía obras realizadas en la isla durante aquel verano: nueve paisajes insulares, un bodegón titulado De la figura románica —segunda versión del que envía a la II Bienal Hispanoamericana de Arte de La Habana— y un boceto de mural sobre plata de cacerías históricas, además de quince monotipos.
De la veintena de obras, siete hacían referencia a la playa de La Caleta de Famara, además de dos bodegones, dos cuadros sobre playas negras de Lanzarote, un tema isleño titulado Cielo y mar y otros cuadros sobre motivos de Femés. Entre los monotipos que presenta, incluye una serie en gamas de negros y blancos que se aleja de su colorido característico. La exposición se acompañó de la conferencia titulada Sentido del arte actual, pronunciada por el artista.
El semanario ‘Antena’ califica de revolucionario a César
En la primavera de aquel año, viaja a París y vive en la capital francesa durante dos meses empapándose de mucha pintura. Al anunciar la exposición, el semanario Antena califica de revolucionario a César Manrique, mientras que la crónica sobre la inauguración señala que “nos ha producido una magnífica impresión con su frescura y fragancia de colores, con una composición cerrada y austera, llena de ricos conceptos de estilización y sencillos rasgos de extraordinaria vigorosidad”.
Manrique comienza a trabajar con figuras superpuestas, suprimiendo la perspectiva y planteando una ordenación plana de la composición. Sigue pintando bodegones de una figuración moderna y realiza, además, una serie de monotipos, más austeros, en los que la descomposición de la figura le lleva a forma más abstractas. Combina la figuración y lo geométrico. Va desarrollando una iconografía propia de carácter insular y arquetípico: barcas, nasas, peces, cactus, volcanes, elementos arquitectónicos, camellos…
El mural de la primera terminal aeroportuaria fue desmontado en 1994
Aquel mismo año de 1953, realiza un gran mural para la sala de viajeros del Aeropuerto de Guacimeta, por encargo del Cabildo Insular. El tema central del mural es una alegoría de la isla de Lanzarote: su gente, arquitectura, geología, fauna, vegetación... Es una composición resuelta en un lenguaje postcubista, con planos facetados, figuras superpuestas y colorido vivo.
Titulada Lanzarote, la obra es un acrílico sobre muro con metáforas y referencias que describen la realidad social y cultural de la isla en la época. El mural fue desmontado y trasladado en 1994 por la Fundación César Manrique. Una reproducción de esta pieza se exhibe en el Punto de Información Turística situado en el puerto deportivo Marina Lanzarote.