En Facebook se ha puesto en marcha un movimiento de recogida de firmas denominado ‘Salvar la residencia de la Cruz Blanca en Altavista, Arrecife, Lanzarote’.
En Arrecife hay más de 6.000 personas con una edad igual o superior a los 65 años, sin embargo, el Gobierno autónomo no considera que la residencia de mayores dependientes que promueve la Hermandad benéfica de franciscanos de la Cruz Blanca sea una infraestructura socio sanitaria necesaria y urgente para el municipio. Con el apoyo de CC y PP, se rechazó que los Presupuestos de Canarias de 2018 incorporaran una partida para finalizar las obras, situadas la calle San Juan del barrio de Altavista y que se encuentran paralizadas y abandonadas desde hace ocho años. Arrecife no es ciudad para viejos.
La idea surgió hace casi veinte años, pero la propuesta cambió de forma con el paso de los años. En principio se pensó en construir un centro de acogida de personas terminales con sida, pero más tarde se optó por una residencia para personas mayores dependientes con discapacidad física y psíquica, y, en especial, a las que se encuentren en una situación de emergencia social. En 2002, ante la sangrante falta de plazas en centros de ancianos en Lanzarote, los franciscanos optaron por intentar dar cobijo a este sector de la población.
En 2009 el proyecto cogió cuerpo y en el mes de abril se colocó la primera piedra
En 2009 el proyecto cogió cuerpo y en el mes de abril se colocó la primera piedra. El centro dispondría de 40 habitaciones y 80 plazas y se esperaba que entrara en funcionamiento en 2011. El edificio contaría con dos plantas, además de un sótano para albergar plazas de garaje. En la primera planta iría el comedor, la cocina, zonas comunes y algunas habitaciones, mientras que en el segundo piso iría el resto de plazas. Se estimó que unas 25 personas serían las encargadas del funcionamiento de la residencia.
El presupuesto ascendía a seis millones de euros, y la Hermandad había arrancado el compromiso del Gobierno de Canarias de que financiaría la totalidad del coste de la residencia, así como el respaldo del Cabildo y del Ayuntamiento de Arrecife. Pero las cosas se torcieron. La financiación pública comprometida nunca llegó y el proyecto se quedó en los cimientos. La Hermandad de la Cruz Blanca nunca se rindió y ha seguido reclamando del Ejecutivo canario la dotación presupuestaria, pero sin éxito.
Los promotores se han visto en la tesitura de tener que devolver a su estado original el solar
Después de ocho años paralizada, los promotores se han visto en la tesitura de tener que devolver a su estado original el solar donde se encuentran las obras inacabadas, debido a razones de seguridad, ya que suponen un peligro potencial. Es de aplicación la ordenanza municipal sobre la seguridad, salubridad, y ornato de los inmuebles de la ciudad, que obligan a su conservación y mantenimiento por parte de los propietarios. La misma ordenanza que no se aplica en decenas de edificios situados en otras zonas de la ciudad.
Arrecife no es ciudad para viejos ni para la conservación del patrimonio. Aun así, en Facebook se ha puesto en marcha un movimiento denominado ‘Salvar la residencia de la Cruz Blanca en Altavista Arrecife Lanzarote’, que recoge firmas a tal fin.