Top Secret, 18 de enero de 2017

¿Quién es el cargo público que se ha quedado 8 meses sin carnet por conducir más alegre de lo normal? Lo cual no es difícil porque el protagonista de la historia no es, que digamos, la alegría de la huerta. Pero nos referimos a otra clase de alegrías.  A la que le costó la carrera política al joven Ayose Callero, por ejemplo, que fue portada en todos los medios de comunicación y muñeco de pimpampum para algunos en concreto. Callero se equivocó, manejó tomado, se estampó y dimitió como concejal en Teguise porque los cargos públicos deben dar ejemplo. Pero, por lo visto, no todos lo hacen. Tenemos datos de uno en concreto al que la Guardia Civil trincó junto a su pareja en un estado tan lamentable que acabaron quitándole el carnet de conducir durante 8 meses. Y de eso no ha salido ni la más mínima en la prensa. Es un cargo público en un puesto de designación digital. O sea, a dedo. Enchufado, para entendernos. En un sector de enorme sensibilidad y vital importancia para la sociedad. Muy necesitado, por cierto, de buenas prácticas políticas. El hombre en cuestión, según nos soplan, reconoció que no conduce porque 'lo pillaron hablando por el móvil'. Cosa extraña porque desde que lo nombraron ha hablado bien poco. Un compañero de partido, de oficina y que ha pasado por situaciones similares, lo disculpó un día que preguntaron argumentando que 'se había dañado un dedo'.  Omertá.

 

Otro más poco ejemplar. ¿Quién es el alto cargo público que debe casi 60.000 euros al ayuntamiento de Arrecife? Desde hace tiempo, además. ¿Dejarán que prescriba esa deuda? Cuando este alto mando del que les hablamos no pudo cumplir con los requisitos de un contrato que se había adjudicado en un concurso, dejó a deber al ayuntamiento capitalino el canon correspondiente. El tiempo ha ido pasando y la deuda creciendo. Tiene, como es natural, un expediente abierto. Pero, ¿camina ese expediente? ¿Corre el riesgo de que se deje caducar, por inactivo? Nos consta que desde la oposición han estado haciendo preguntas más o menos incómodas últimamente. El departamento encargado de perseguir al deudor le está mandando requerimientos a la empresa que tenía o representaba este dirigente político. Sin respuesta alguna. ¿Eso vale como que el expediente se mueve? En todo caso, tratándose de una persona muy conocida, aunque su despacho no esté actualmente en Lanzarote, ¿no es mejor notificarle a él personalmente para que quede constancia y el expediente no se duerma? 

 

He aquí el gran dilema en este país de excusas de mal pagador e hipocresía sin límites. El que conducía lerele es obvio que tendría que haber dejado su enchufe y regresar a las aulas. Si se acuerda cómo era. Insistimos en el ejemplo de la dimisión del concejal de Somos (donde, por cierto, hay chiquito mosqueo con esto: se sienten agraviados porque los medios informamos de uno sí y del otro , no). En cuanto al de los 60.000...¿debe dimitir? Podemos seguir haciendo preguntas ¿puede una pequeña empresa o autónomo trabajar con una institución si no está al corriente con Hacienda y la Seguridad Social? La respuesta es, No. ¿Puede, una persona, representar a un Gobierno acumulando una deuda con una Institución? Poder, puede. Que ya lo estamos viendo. Y aunque es un cargo de tercer nivel en Canarias, torres más altas han caído. Miren para Euskadi y para el PP, ¡el PP!: se fulminó a todo un delegado del Gobierno por comprar un CD en un top manta. Pues eso.