Las obras van con retraso
Yaiza exige al Gobierno "ritmo y garantía de financiación" en las obras del puerto
Óscar Noda ha recordado al consejero de Obras Públicas y Transportes, Pablo Rodríguez, "el compromiso manifiesto del Gobierno de Canarias de finalizar la obra, como tarde, en 2021".
"Entendemos perfectamente los mensajes de tranquilidad que traslada el Gobierno, pero el Ayuntamiento exige el mantenimiento del ritmo de ejecución del proyecto, el cumplimiento de los plazos y la garantía de financiación total de las obras". Estas fueron las palabras del alcalde de Yaiza, Óscar Noda, al vicepresidente del Gobierno de Canarias y también responsable de la Consejería de Obras Públicas y Transportes del Ejecutivo regional, Pablo Rodríguez, durante la vista a las obras de ampliación del puerto de Playa Blanca.
Asimismo, Noda recordó a Pablo Rodríguez que el presidente del Gobierno, Fernando Clavijo, en enero de este mismo año "aseguró que Playa Blanca y Lanzarote tendrían, como tarde, nuevo puerto operativo en noviembre de 2021".
El proyecto, de 40 millones de euros, está financiado en un 85 por ciento por Europa a través de los fondos Feder, mientras que la Comunidad Autónoma asume el 15 por ciento restante. Si bien el Gobierno asegura que aún no tiene requerimiento alguno de Europa, la preocupación del Ayuntamiento de Yaiza está motivada en que a 31 de diciembre de 2018 hay que justificar a la Unión Europea la inversión de 22 millones de euros de inversión, y las previsiones apuntan a la justificación, pago y certificación de 10 millones, tal y como lo ha reconocido el Gobierno.
"Esperamos que no seamos todos los canarios los que al final tengamos que pagar la obra a sabiendas de la existencia de financiación mayoritaria por parte de Europa", apuntó el alcalde de Yaiza, que estuvo acompañado en el recorrido por los concejales Daniel Medina, Jonatan Lemes y Javier Camacho.
El puerto de Playa Blanca mueve un millón de pasajeros y más de 250.000 vehículos anuales entre Lanzarote y Fuerteventura, por ello es un proyecto de importancia estratégica y económica que ahora se encuentra en una situación de limitación ya que comparten el puerto ferrys y embarcaciones pesqueras y deportivas.
Tuvieron que pasar más de 20 años para que el proyecto se desbloqueara la legislatura pasada, sin embargo las obras van con retraso porque las mismas debieron comenzar en junio de 2017 y empezaron en noviembre de este año.
Además de dar solución a los problemas de convivencia de ferrys con la flota pesquera y deportiva, el nuevo puerto de Playa Blanca quedará preparado para permitir el atraque de cruceros, de ahí la preocupación del Gobierno de Yaiza por el cumplimiento de los plazos.
