El periodista Manuel Fernández Hernández, Hijo Predilecto de Arrecife

Al cumplirse ochenta años de su fallecimiento, y más de cuarenta del final de la dictadura del general Franco, Arrecife reconoce a uno de sus grandes hijos, el periodista y republicano Manuel Fernández Hernández (1881-1936). El pleno municipal acordó declararlo Hijo Predilecto de la ciudad a título póstumo, haciendo así justicia con la memoria de un tiempo y un olvidado. El grupo Popular se abstuvo alegando motivos formales, mientras que los restantes grupos se pronunciaron a favor de la propuesta.

 

La iniciativa partió de Somos Lanzarote y contemplaba que algún espacio de la ciudad lleve el nombre de Manuel Fernández. De hecho, será la nueva plaza situada delante de la Agencia Tributaria Canaria, surgida tras la remodelación de la avenida. Manuel Fernández murió en el campo de concentración de La Isleta en 1936.

 

En fechas recientes, Jaime Balaguer impartió una conferencia en el Archivo Histórico de la ciudad sobre su trayectoria, titulada “Vida y muerte de un arrecifeño en su contexto histórico”. Según Balaguer, en los escritos y documentos que se conservan de Manuel Fernández se encuentran la crítica al caciquismo, la queja por el mal gobierno y la falta de inversiones, la preocupación por la emigración, la oposición a la división provincial del Archipiélago o la crítica a los vicios y a las posiciones antiliberales del clero.

 

 

Republicano, ilustrado y de izquierdas, Manuel Fernández fue, sobre todo, un activista comprometido con su ciudad y su isla. Fundó y presidió la Sociedad Obrera de Arrecife, de la que sería fundador y presidente. Esta Sociedad creó su propio periódico y se dedicó a la alfabetización de los obreros, tarea que contó con el respaldo de la centenaria Sociedad Democracia.

 

Al producirse el levantamiento militar contra la IIª República, en 1936, Manuel Fernández fue detenido y trasladado a Las Palmas de Gran Canaria. Llegó al campo de concentración de la Isleta un 5 de octubre y falleció ese mismo día. Enormes palizas y todo tipo de actos execrables y humillantes acabaron con su vida. Su cadáver fue conducido al cementerio de la ciudad y enterrado en una fosa común.

 

Manuel Fernández Hernández dirigió ‘Cronista de Arrecife’ (1899-1900) y ‘El Proletario’ (1902). Fue colaborador del semanario majorero ‘La Aurora’ (1900-1906), de los periódicos tinerfeños ‘El Obrero’ (1900-1914) y ‘El Progreso: diario republicano’ (1905-1932), así como de los lanzaroteños ‘La Prensa’ (1903), ‘Heraldo de Lanzarote’ (1902-1903) y ‘La Voz de Lanzarote’ (1913 y 1917-1918).

 

Sus descendientes y el periodismo insular ven así reparado el abandono al que ha estado sometido durante demasiado tiempo. Un paso adelante con la memoria histórica en Arrecife.