Asolan vuelve a casa

La reunificación del sector turístico lanzaroteño se ha materializado en la presentación oficial de la Federación Turística de Lanzarote. Es decir, Asolan ha vuelto a casa y la isla se convierte, nuevamente, en referente turístico al ser pionera en la puesta en marcha de una federación que aglutina sus intereses. El sector nació unido hace décadas y se creó una federación, pero los alojativos decidieron agruparse en torno a Asolan, que se desgajó, y ahora regresan al punto de partida: pelillos a la mar.
 
Lo importante es que los alojativos se han dado cuenta de que, aunque son grandes empresas, necesitan a las pequeñas y medianas. Así, la nueva entidad aglutina a siete asociaciones turísticas vinculadas al sector y de nuevo se marca tendencia en Canarias: Asolan (Hoteles y Alojamientos Turísticos), Hostelan (hostelería y restauración), Asociación de Agencias de Viaje y Tour Operadores, Asociación de Ocio, Buco (Asociación de Centros y Escuelas de Buceo), Aserent (Asociación de Rent a Car) y Astratur (Asociación de Transporte Discrecional). 
 
La Federación no oculta su vocación de ser escuchada por las instituciones públicas e influir en la toma de decisiones cuando, con motivo de su presentación, puso de relieve que la  industria  turística  representa  la  fuerza  motriz  de la  economía insular, un impacto del 80% en el PIB de Lanzarote y más del 60 por ciento  de  los empleos  generados directa  e indirectamente  por el sector. Razones  de  peso  que sustentan la constitución y desarrollo de esta nueva entidad. En efecto, la unión hace la fuerza.
 
La reunificación no es una respuesta las crisis provocadas por la marcha de Ryanair o la quiebra de  Thomas Cook, ya que se acordó formalmente en julio, antes de que surgieran estos graves problemas. Es, más bien, un intento de reposicionarse sectorial y empresarialmente ante los desafíos de un nuevo modelo turístico, que debe estar cruzado por la sostenibilidad para hacerle frente a la diversificación, la digitalización, la dispersión, la diferenciación y la deslocalización. Juntos tienen más peso.

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