José Torres Fuentes está a punto de cumplir cuatro años como presidente interino de la Cámara de Comercio de Lanzarote. Pero se supone que su interinidad tiene fecha fija, ya que antes del 30 de septiembre de este año habrá elecciones en la Cámara. En la de Lanzarote y en todas las del país. De celebrarse los comicios, se hará con más de cuatro años de retraso, ya que debieron tener lugar en 2014. La cosa es que el mandato general de cuatro años de los actuales órganos de gobierno de las cámaras españolas se encuentra prorrogado desde los últimos sufragios, celebrados en 2010. ¿Y eso?
Tras la entrada en vigor de la nueva Ley estatal básica de Cámaras de Comercio, hace cuatro años, las comunidades autónomas debían adecuar sus respectivas leyes camerales al nuevo marco normativo y, después, abrir los procesos electorales en sus territorios. Canarias se encuentra entre las Comunidades Autónomas que no han concluido la adaptación a la nueva Ley estatal, aunque se está tramitando. Las cuatro cámaras de comercio existentes en Canarias confían en que la nueva ley autonómica garantice una financiación pública que permita la subsistencia de estas corporaciones. No les des más vueltas, ya que esta es la clave de todo: la manutención de las cámaras.
Es probable que las elecciones a las Cámaras de Comercio no puedan convocarse este año
El Gobierno de Canarias tendrá que establecer con exactitud los días en que las cuatro cámaras de comercio de las islas deberán celebrar sus elecciones. Estas son las insulares de Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura y la provincial de la demarcación de Santa Cruz de Tenerife. Y deberá hacerlo dentro del plazo fijado por el Gobierno de Mariano Rajoy, es decir, antes del 30 de septiembre de este año. Pero, como ya se indicó, antes se deberá aprobar la nueva Ley de Cámaras Oficiales de Comercio, Industria, Servicios y Navegación de Canarias, cuyo anteproyecto ya ha sido dictaminado favorablemente por el Consejo Económico y Social.
El citado Anteproyecto debe ser aprobado por el Parlamento autónomo. Tal como están las cosas, o lo hace en un tiempo récord, o las elecciones a las Cámaras de Comercio no podrán convocarse este año, habida cuenta de que éstas tendrán luego que adaptar sus reglamentos, algo que también lleva su tiempo. Parece, no obstante, que hay un consenso amplio para sacar adelante el Anteproyecto de Ley en el Parlamento. Así, el portavoz de Nueva Canarias (NC) en el Parlamento regional, Román Rodríguez, por ejemplo, se comprometió a defender la viabilidad futura de estas organizaciones en la tramitación de la nueva Ley, y apuesta por no ponerles trabas en su labor en pro de las empresas canarias.
Las cámaras tienen sus órganos de gobierno con mandatos caducados desde 2014
Las primeras elecciones a la Cámara de Comercio de Lanzarote tuvieron lugar en 2006 y Eduardo Spínola resultó elegido el primer presidente de esta corporación de derecho público. En 2010 hubo unas segundas elecciones, siendo José Torres Fuentes designado presidente. A la espera de que culminen los trámites antedichos, las próximas elecciones resolverán la situación anómala en la que se encuentran ahora estas instituciones, que tienen todos sus órganos de gobierno con mandatos caducados desde 2014 y en situación de interinidad.
El diputado del Grupo Nacionalista Canario por Fuerteventura, Mario Cabrera, reclamó hace poco al Gobierno regional más agilidad en la tramitación de las medidas de apoyo a las cámaras de Lanzarote y Fuerteventura, porque su supervivencia “puede estar amenazada a corto plazo”.
El nuevo régimen electoral de las cámaras
Las próximas elecciones a las cámaras de comercio se regirán por la nueva Ley Básica estatal, que mantuvo la obligatoriedad de las empresas de asociarse a las cámaras, pero convirtió en voluntario el pago de cuotas de afiliación. Por esta razón, las cámaras están obligadas a financiarse a partir de los ingresos por prestación de servicios y aportaciones voluntarias.
La Ley estatal también introdujo cambios en el proceso electoral. Así se ha dado más peso en los órganos de gobierno de las cámaras a las empresas que más contribuyan a financiarlas, obligando a que al menos la mayoría del pleno sea elegido por sufragio universal de los representantes de las empresas asociadas.
El nuevo régimen electoral establece que los plenos de las cámaras puedan tener entre diez y sesenta miembros. Un mínimo de dos tercios deben ser escogidos mediante sufragio universal por parte de los representantes de los diferentes sectores económicos. Otro 10 por ciento deben ser personas de reconocido prestigio en la vida económica del ámbito de la Cámara, y deberán ser propuestas por las organizaciones empresariales más representativas. Por último, el resto de los vocales, casi el 25 por ciento, representará a las empresas que hagan mayores aportaciones económicas para el sostenimiento de las cámaras.
