PP, el que fue el acomodo de (algunos) fachas
Puestos a pintar posibles escenarios en la política española, habría que realizar algunas matizaciones al mismo. Una, que el partido VOX es de ultraderecha, lo cual no puede ser más evidente, tanto, como que no toda la ultraderecha está representada en él. VOX se ha nutrido de la extrema derecha que convivía con moderados en un mismo partido, aunque algunos fachas puedan seguir agazapados en el PP o en otros lugares.
VOX se nutre, además, de descontentos y resentidos provenientes de corrientes moderadas que dan un voto de castigo a esos partidos con los que simpatizaban, por lo cual, con la misma facilidad que han votado a la ultraderecha, podrán recuperar el rumbo cuando se den las condiciones para ello o cuando descubran al monstruo que han ayudado a crear.
El propio Casado debe aclararnos qué pintan aquí ellos o los de Cs
Con la afirmación de que no todos los fachas están en VOX, también podemos constatar que los intuimos entre miembros de la comunidad catalana o vasca, con un alto porcentaje de extremistas, xenófobos y toda suerte de anti demócratas travestidos de patriotas de aldea. Fachas, al fin y al cabo. Lo de los nacionalistas canarios es otro facherío, poco ideológico y muy de cartera y mano a la caja de las perras.
Hoy, si podemos decir que el PP parece un partido de centro derecha, porque habiéndose definido así desde tiempo atrás, en él se cobijaba todo lo que estuviera comprendido entre la moderación y los excesos de la ultraderecha. En la actualidad, el panorama público tiene un nuevo estante al que se han caído del piso de arriba casi todos los extremistas de derecha. A la estantería de VOX han ido a parar, aunque por momentos nos hayamos podido liar sobre dónde empiezan unos y terminan otros.
Casi aclarado dónde está cada uno por la irrupción del nuevo partido, el propio Casado debe aclararnos qué pintan aquí ellos o los de Cs, porque con el colador en funcionamiento ahora parecen acoger al mismo nicho de simpatizantes.
Dado que Casado ha dado un volantazo, el atropello a los del otro carril es inevitable
Habiéndose largado los extremistas del PP hacia la caverna de VOX, tanto aquellos como Cs deberán convencernos de que cosa son cada uno. Porque si ambos albergan mayoritariamente a los mismos, desde la derecha moderada a un centro derecha y un centro izquierda, esos matices acabarán pasando factura a los dos partidos. Si la derecha moderada fuera ahora el PP, el centro sería Cs. Dado que Casado ha dado un volantazo para colocarse en el centro, el atropello a los del otro carril es inevitable. A ver dónde nos situamos los electores o es que sobra alguno de los dos.
De aquí a la próxima convocatoria de generales, sabremos quién devora a quién, y en ese momento los cabreados moderados que se fueron a VOX retornarán o no. La ultraderecha siempre existe, pero será más o menos visible en función de la calidad política de los demócratas del resto de partidos, tan escasa últimamente y tan llena de fatuos, imbéciles o ambas cosas. Justo las condiciones para que los “patriotas” de ultraderecha hagan su agosto, cuando deberían ser residuales.
En el contexto de para quién es el centro, podríamos preguntarnos que quién se acuerda de UPyD y de Rosa Díez. Pues eso.
