De la mano de Marina Albiol de Izquierda Unida

Las Kellys llevan su lucha hasta el Parlamento Europeo

La Asociación, que agrupa a miles de camareras de pisos de toda España, ha presentado una petición a la Eurocámara para conseguir que sean reconocidos los derechos laborales de estas profesionales.

Las Kellys llevan su lucha hasta el Parlamento Europeo

De la mano de la portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, la asociación Las Kellys, que agrupa a miles de camareras de pisos de toda España, ha presentado una petición a la Eurocámara para conseguir que sean reconocidos los derechos laborales de estas profesionales. 

Según Albiol, "se trata de un colectivo de profesionales, prácticamente mujeres en su totalidad, que sistemáticamente se ven sometidas a unas condiciones laborales abusivas. Prácticamente se ha regularizado entre las grandes cadenas de hoteles un régimen de explotación hacia estas camareras que está afectando a su salud, que no les permite periodos de descanso mínimos, que no deja que puedan conciliar el trabajo con su vida personal, y en general cada vez tienen condiciones más precarias. Ante esta realidad, se ven obligadas a recurrir a las instituciones europeas para que ni las autoridades valencianas ni el gobierno central están atendiendo a sus necesidades".
 
Desde hace meses, las Kellys denuncian públicamente los abusos a los que son sometidas en su profesión, una situación que en los últimos meses, desde la implantación de la última reforma laboral, se ha agravado con la presencia de empresas 'multiservicio' que subcontratan a las camareras de pisos en unas condiciones mucho más precarias e injustas que si fueran contratadas por los propios hoteles. 
 
"Hay ya un rosario de infracciones detectadas y denunciadas por esta subcontratación poco clara por parte de terceras empresas. Pero el contexto que ha creado la reforma laboral ha facilitado que la fórmula se implante rápidamente en muchos hoteles, extendiendo sus prácticas abusivas" ha afirmado el portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo.
 
A esto, según Albiol, "se le añade unas condiciones que ya sufrían extremadamente exigentes: deben mover muebles pesados, limpiar a fondo habitaciones en cuestión de minutos, encaramarse sin protección a lugares elevados para poder limpiar aspirando productos químicos..."
 
Así mismo, desde la Asociación han denunciando "frecuentes casos de acoso, enfermedades que se derivan del trabajo y que no están reconocidas como tal, ausencia de derechos básicos como la protección a las embarazadas, y numerosas dolencias derivadas del continuo estrés al que están sometidas por su carga de trabajo".
 
En su escrito ante el Europarlamento las Kellys señalan varios incumplimientos de directivas y normas de la propia UE que están sufriendo: la directiva 89/391 / CEE sobre protección de seguridad en el trabajo; la COM / 2008/0635 sobre el apoyo a la conciliación profesional, privada y familiar; el artículo 34 de la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE sobre el acceso a la protección en casos de maternidad, enfermedad o accidentes laborales; el artículo 27 de la Carta Social Europea sobre la promoción de guarderías; el artículo 31 de la Carta de Derechos Fundamentales sobre la salud y seguridad en el lugar de trabajo...
 
Por último, ha concluido Albiol, "todos estos incumplimientos, en un sector además que debería velar especialmente por la calidad de sus servicios, ponen de manifiesto que decenas de miles de mujeres sufren sistemáticamente unas condiciones laborales que no deberían ser propias de Europa. Y esto tiene que acabar".

Comentarios