MOVILIDAD
Coches eléctricos, muy pocos pero vienen para quedarse
El número de vehículos eléctricos en Lanzarote apenas supera el centenar frente a un parque integrado por casi 90.000 turismos. Todavía son muy poquitos.
Con paso muy lento, pero firme, avanza en la isla la introducción de los vehículos eléctricos desde que, en 2012, la Cámara de Comercio instalara la primera fotolinera de Canarias. Aquella instalación fotovoltaica para la recarga de vehículos eléctricos con energía solar fue concebida y diseñada íntegramente en la propia isla. Entonces había 15 vehículos eléctricos, tan solo. Hoy, seis años después, la cifra apenas supera el centenar frente a un parque integrado por casi 90.000 turismos. Son muy poquitos todavía.
El número de coches cien por cien eléctricos ha crecido de forma notable hace escasas fechas gracias al impulso de Canal Gestión. La flota móvil adscrita a la empresa concesionaria de la gestión del agua está compuesta por cien vehículos, pero, tras una reciente adquisición, 34 de ellos pasan a ser eléctricos. Asimismo, Cabildo y ayuntamientos se esfuerzan en dar ejemplo al resto de la sociedad incorporando este tipo de vehículos a sus flotas.
Actualmente hay una decena de electrolineras en espacios públicos
Lanzarote es una isla ideal para la implantación del vehículo eléctrico, debido a su escasa altitud y su reducido tamaño. Los coches eléctricos que ofrece el mercado suelen ser de sesenta kilovatios por hora, lo que permite una autonomía de 400 kilómetros, una distancia que garantiza que nadie se quede tirado en las carreteras isleñas conduciendo un coche eléctrico. Pero, para que sea así ha de haber suficientes puntos de recarga.
Actualmente hay en Lanzarote una decena de electrolineras en espacios públicos. Son de carga rápida y permiten repostar con energía renovable en menos de una hora. Canal Gestión tiene más de tres decenas puntos de recarga, pero para su vehículos y en sus propias instalaciones. En estos días, hay un debate en el país porque el Gobierno de Pedro Sánchez pretende que las casi doce mil gasolineras existentes en todo el Estado incorporen a corto plazo puntos de recarga de coches eléctricos para fomentar su uso, reducir la contaminación y combatir el cambio climático.
En la actualidad son menos de 800 los vehículos cien por cien eléctricos existentes en el Archipiélago, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC). Esa cifra no llega ni al 0,01% del parque móvil total, que está formado por más de 1,1 millones de turismos. Los híbridos, en cambio, suponen varios miles. Por lo tanto, queda mucho por hacer para alcanzar los niveles de Noruega, el país con mayor número de vehículos eléctricos por persona del mundo.
Entre las ventajas destaca que no contaminan y hacen poco o ningún ruido
Todavía son muy pocos, pero nadie duda que han llegado para quedarse. Entre las ventajas destaca que no contaminan, hacen poco o ningún ruido, su mantenimiento es más barato, el motor es más pequeño por lo que la mayoría del espacio del coche está destinado a la habitabilidad, necesita menos energía para realizar el mismo esfuerzo y su uso genera mayor ahorro.
Los detractores del coche eléctrico subrayan, en cambio, que son más caros que un coche de gasolina, su escasa autonomía (de 200 a 400 kilómetros por lo general), que la red pública de recarga está muy poco desarrollada y hay pocos puntos de recarga, la presencia de pocos talleres especializados porque la demanda aun es muy pequeña y que el Estado apenas ofrece incentivos para su adquisición.
El año pasado, la mitad de los vehículos nuevos vendidos en Noruega fueron eléctricos o híbridos, unas ventas alentadas por un potente plan de ayudas estatales que incluye la exención a los automóviles eléctricos nuevos de casi todos los impuestos y beneficios como estacionamiento gratuito o subsidiado. Estamos lejos, pero llegaremos muy pronto a esos niveles porque ANFAC aspira a que España produzca quinientos mil coches eléctricos en 2030 y que alcancen una cuota de mercado del 30%.