‘Pepotecámara’

Torres más altas han caído, asegura un viejo dicho. Aunque igual era una profecía por cumplir. A Pepote no le gusta la alcaldesa, y puede que a otros tampoco les guste. Es probable que tengan, o crean tener, razones para discrepar de su gestión. Se puede no compartir el cierre al tráfico de la avenida o pueden oponerse a él por razones particularísimas y muy distantes del interés general.
 
Pero ‘Pepotecámara’ se está saltando algunos semáforos en rojo. En la representatividad que se supone recae en su persona, hablando del órgano que alguien dirige, resulta de poca finura andar utilizando su cargo para hacer política, primero, porque no le corresponde, y segundo, porque lo que hace es de baja estofa.
 
Si al presidente de un club náutico, pongo por caso, se le ocurriera saltarse determinadas formas y dejar de lado la imparcialidad que debe asistirle, entendería que los socios aplicaran un severo correctivo a su presidente porque habría dejado de representar a la totalidad de los socios.
 
A ‘Pepotecámara’ le abandonó la mesura que debería presumírsele, aunque nunca la haya mostrado
Si en el colegio, el director, que debe representar a una comunidad heterogénea e ideológicamente variada, al  que toca ser el pegamento de todos —justo esa posición que se logra con cierta equidistancia y delicados equilibrios— se vuelve parcial, habrá dejado de tener las condiciones para seguir en el cargo. Y si lo que quiere es representarse a sí mismo, que hable en su nombre fuera del órgano y que no utilice en sus veleidades los recursos del órgano. Y no conozco a nadie, bueno, sí, a los cargos públicos independentistas catalanes, que trasladen sus sicosis a los cargos que representan. 
 
Si en una de las múltiples cámaras de comercio que existen, su presidente se pasa por la turmix las sensibilidades de parte de sus integrantes, tarda en ponerse en la calle, a ser posible en la avenida. A ‘Pepotecámara’ le abandonó la mesura que debería presumírsele, aunque nunca la haya mostrado. Se me ocurre, motivado por ese intento de redefinición de VOX por parte del PP, para no ofender a los de extrema derecha, afirmando que VOX es al PP lo que Podemos al PSOE, que José Torres Fuentes parece a la Cámara de Comercio de Lanzarote lo que un facha a la democracia.
 
De nada.

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