Un paciente denuncia “caos en el hospital al abrir la nueva planta de cirugía”

Rogelio Quintana, vecino de Lanzarote se operó el pasado 21 de febrero en el Hospital José Molina Orosa, y pese a que la cirugía se llevó a cabo con éxito y el tratamiento dispensado por el personal sanitario “no pudo ser mejor”, según este paciente, lo cierto es que Rogelio asegura haber vivido “unos días de auténtico sufrimiento e inmerso en el caos”. Su ingreso en el Hospital coincide con la apertura de la nueva planta de cirugía general que se llevó a cabo en la tercera semana de febrero después de permanecer cerrada durante un largo periodo de tiempo.

“Llevaba dos días convaleciente de la operación y me dijeron que nos tenían que trasladar a todos a la nueva planta, fue un caos, traían las camas del otro ala y nos mudaban en ellas, todo se hizo en un solo día y se montó un lío tremendo, pese al esfuerzo que hizo el personal, no daba abasto”, Rogelio se pregunta si el cambio no pudo hacerse poco a poco, puesto que “el tratamiento y la atención que esos días recibíamos los pacientes era ineficaz”.

El relato de Rogelio Quintana rezuma impotencia “ pues estaba en la nueva habitación y no me ponían el tratamiento a las horas establecidas, de hecho en alguna ocasión tuve que esperar por los antibióticos mas de dos horas”. Y es que según Rogelio una vez que llegaron a la nueva planta tuvieron que esperar a que repusieran en la misma los tratamientos de los pacientes.

El paciente que en todo momento sostiene que médicos enfermeros y auxiliares hacían todo lo posible por llevar a cabo su trabajo y dispensaban un trato excelente a los enfermos, asegura que “el personal se vio desbordado por las circunstancias”. De hecho apunta que durante esos días “escuchaba a los enfermos llamar a las enfermeras reiteradamente y tardaban mucho en llegar” en ese sentido relata que “en una de las jornadas después de ducharme, no vinieron a cambiarme las vendas mojadas de la herida y estuve casi cuatro horas con ellas pegadas al cuerpo”.

Rogelio mantiene además que era muy difícil descansar porque continuamente había cambios y “como además iban con retrasos podían llegar a la habitación a las 12 de la noche” y en ese sentido apunta que “el propio personal sanitario se disculpaban al tiempo que referían que todo se debe a la falta de personal”.

El agua de la ducha sale hasta la habitación

Otra de las cuestiones que el paciente denuncia es la obra de los baños, “no le han dado la pendiente adecuada a las duchas y se sale toda el agua hacia la habitación lo que sin duda genera una situación de peligro para todos dado que cualquiera podría resbalarse".

Cabe recordar que esta nueva planta consta de 25 habitaciones, todas dobles menos una individual, pese a que las obras se habían terminado hace tiempo con una inversión de más de 650 mil euros , se abrió el pasado mes de febrero. Esta nueva planta de cirugía general ocupa una supercie de 841 metros cuadrados y alberga a pacientes de digestivo, urología, oftalmología y otorrinolaringología.

La antigua planta que según Rogelio Quintana se quedó vacía, según apunta Erasmo García, el Director del área de Salud de Lanzarote se ha reestructurado para otros servicios de hospitalización y para hemodinámica.

El responsable del área asegura que no ha tenido ninguna queja con respecto a los baños y que “desconocía que hubiese un problema con el agua de las duchas, aunque parece raro dado que antes de la recepción de las obras se supervisa todo” no obstante manifestaba su voluntad de informarse al respecto.

Para Rogelio Quintana que se recupera aún de la intervención, tras dos semanas ingresado el Hospital, esto se ha debido “a la inmadurez de los políticos y a sus deseos de hacerse notar sin tener en cuenta el daño y el sufrimiento que hemos tenido que pasar los pacientes, sólo porque ellos querían presumir en estos momento de haber abierto la nueva planta”.