MEMORIA HISTÓRICA

Domingo y Pedro, los dos lanzaroteños que perdieron la vida en Gusen-Mauthausen

Después del golpe militar y la posterior Guerra Civil española, fueron muchos los canarios de las islas orientales que se evadieron al continente africano.

Domingo y Pedro, los dos lanzaroteños que perdieron la vida en Gusen-Mauthausen

El lanzaroteño Pedro Noda de la Cruz (Yaiza, 30 de agosto de 1913) perdió la vida en el Campo de Concentración de Mauthausen el 6 de mayo de 1942. Hoy hace 78 años. Otro hijo de Lanzarote, Domingo L. Cedrés Arrocha (Papagayo, Femés, 18 de diciembre de 1906), murió el 18 de noviembre de 1941 en el Campo de Concentración de Gusen. Junto a veintisiete canarios más, ambos figuran en el listado de españoles muertos en los campos nazis de exterminio también durante la II Guerra Mundial. El 5 de mayo de 1945 las tropas estadounidenses entraron en Mauthausen. Ayer se cumplieron 75 años.
Pedro Noda de la Cruz murió cruelmente represaliado tras un intento de fuga
 
La novelesca historia de Pedro Noda de la Cruz fue recogida en 2005 en El País. Aquel año, un joven de nombre Pedro Noda, de 29 años de edad, “encontró por azar en un buscador de la red una parte de su pasado, al indagar sobre el resultado de un partido de balonmano del equipo en el que jugaba”, el San José Obrerode Titerroy, en Arrecife. Se había topado con la información sobre la tumba de su abuelo, Pedro Noda de la Cruz, asesinado en el campo de trabajo externo de Bretstein, perteneciente a Mauthausen.
 
Después del golpe militar y la posterior Guerra Civil española, fueron muchos los canarios de las islas orientales que se evadieron al continente africano, sobre todo marinos y pescadores. Era un territorio que conocían a la perfección porque la flota pesquera insular faenaba habitualmente en aquellas aguas. Los tripulantes de unas dos docenas de barcos aprovecharon su viaje al banco pesquero sahariano para pasarse al bando republicano, o simplemente para evitar ser movilizados por los golpistas. Es el caso de Pedro y Domingo.
 
Una vez en África, Noda de la Cruz cruzó a Francia, donde fue detenido por los nazis y enviado a Bretstein, en Austria, donde trabajó bajo duras condiciones construyendo un camino de piedra. Los republicanos españoles empezaron a sustituir a prisioneros de guerra franceses en Bretstein en el verano de 1941. Allí no había futuro alguno y planeó escapar junto a otros internos, pero fueron descubiertos y el supuesto cabecilla del intento de fuga, el propio Pedro, fue brutalmente apaleado, atado a una carreta y arrastrado por todo el recinto hasta causarle la muerte. Su cadáver maltrecho fue expuesto en señal escarmiento.
Según los registros, Domingo Cedrés Arrocha murió a causa de una bronconeumonía
 
El otro fallecido, Domingo Cedrés Arrocha, nace en el domicilio familiar del caserío de Papagayo. Según Fabián Hernández Romero —deportadoscanarios.wordpress.com—, sus ancestros proceden mayoritariamente del pueblo de Tías; su padre era marino de profesión y su madre era natural de Tías. Más tarde, la familia abandona las playas de Papagayo para establecerse en Arrecife. Su última dirección en la capital de la isla es el nº 5 de la calle Academia, al lado de la Iglesia San Ginés.
 
En 1939 Domingo Cedrés Arrocha se encuentra en algún campo para refugiados republicanos españoles habilitado en Francia. Ya en plena II Guerra Mundial,  es detenido por los nazis en territorio francés. Todo apunta a que se encontraba alistado en alguna compañía de trabajadores, cuyo cometido era principalmente la realización de obras civiles. Finalmente, Domingo es apresado y trasladado a Alemania. En abril de 1941 es deportado al Campo de Concentración de Mauthausen, en Austria.
 
En este grupo de españoles deportados a Mauthausen se encuentran otros cinco canarios, entre ellos el lanzaroteño José Cruz Barreto y Casimiro Morales de la Hoz, también natural de la provincia de Las Palmas. Dos meses más tarde, Domingo fue transferido al subcampo de Gusen, dependiente de Mauthausen. De acuerdo con los registros de defunción, Domingo Cedrés Arrocha murió en noviembre de 1941 a causa de una bronconeumonía. No obstante, la causa aparente de la muerte no se correlaciona necesariamente con las razones reales, pues a menudo los asesinatos fueron disfrazados como causas naturales. 

4.435 los españoles fallecidos en Mauthausen

Según Gutmaro Gómez Bravo, un estudio realizado en 2019 por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) cifró en 4.435 los españoles fallecidos en Mauthausen (www.publico.es). El Ejército norteamericano halló en el complejo de Mauthausen-Gusen a más de tres mil supervivientes españoles. 
 
La mayoría obtuvo la nacionalidad francesa y permaneció en ese país confiando en una pronta caída de la dictadura franquista por parte de las fuerzas aliadas, que nunca se produjo. Gutmaro Gómez Bravo es miembro del Departamento de Historia Moderna y Contemporánea de la UCM y del Grupo de Investigación de la Guerra Civil y el Franquismo.

Comentarios