La concejalía de Comercio del Ayuntamiento de San Bartolomé ha instalado dos grandes esculturas en forma de corazones que servirán para recoger tapones solidarios. Una de ellas está situada en la calle Rubicón en San Bartolomé, a la altura de la entrada de la plaza León y Castillo, y la otra está en la calle Mayor de Playa Honda.
Estos corazones, que han sido forjados el herrero Moisés Afonso, que cuenta con numerosos e importantes títulos como el de Campeón de España de Herrería Artística o el Premio Nacional de Herrería, día a día irán tomando el color de los tapones solidarios que los vecinos vayan depositando. Cada corazón recogerá un total de 240 kilos de tapones. Las esculturas pesan 260 kilos y miden 2,20 metros de altura.
El primer teniente alcalde y concejal de Comercio, David Rocío, ha indicado que "son muchas las personas que cada día guardan en casa esos tapones y ahora tendrán a mano un punto más, dos grandes corazones visuales y estéticos que se irán transformando con el color de la solidaridad".
En Lanzarote estos son los primeros corazones que se suman a la iniciativa de Nerea Afonso una niña de siete años que pidió a su padre, herrero de profesión que hiciera realidad aprovechando sus manos y habilidades como artesano de la forja, para hacer una escultura grande que sirviera para recoger tapones y ayudar a otros niños y niñas.
Moisés forjó la escultura, un gran y sólido corazón de acero, y la cedió al Ayuntamiento de Icod de los vinos para que fuera colocada en una céntrica calle de la localidad, cumpliendo así con la propuesta de su hija de ayudar a los demás con lo que realmente él mejor que nadie podía hacer, esculpir en acero.
Moisés Afonso ha señalado que esta escultura denominada Conciencia T, tiene un fin didáctico y solidario, y no es otro que dar un claro mensaje “pequeños gestos pueden hacer una gran labor para ayudar a otras personas”.