Una actividad en entredicho

Las excursiones en quads, car cross, buggies y similares, en el ojo del huracán tras la tragedia del rofero de Guatiza

Operativo montado en el accidente del car cross
Operativo montado en el accidente del car cross
Una mujer ha perdido la vida y su hija está en estado crítico. Ambas viajaban a bordo de un vehículo biplaza de los que estamos acostumbrados a ver, en caravana, por caminos fuera de carretera.
Las excursiones en quads, car cross, buggies y similares, en el ojo del huracán tras la tragedia del rofero de Guatiza

Una mujer ha perdido la vida y su hija está en estado crítico. Ambas viajaban a bordo de un vehículo biplaza de los que estamos acostumbrados a ver, en caravana, por caminos fuera de carretera. Normalmente, y debido a la sequedad de la isla, una columna de polvo anuncia, a lo lejos, la presencia de este tipo de excursiones. Y ahí nos solemos hacer, inevitablemente, la misma pregunta. ¿Es esto legal? Más allá ¿Es normal? A cualquier ciudadano le llama la atención que en una isla con gran parte de su superficie bajo alguna figura de protección medioambiental, donde somos testigos de las polémicas que se montan cada vez que se plantea un 'rallye de tierra', campen a sus anchas este tipo de comitivas cada día, a horas varias y en cualquier sitio.

Los antecedentes a este tipo de actividades los encontramos en los Jeep Safari. Vehículos que, a diferencia de ahora, eran conducidos por personal de la empresa que organizaba las excursiones que, normalmente, transportaba en la "caja" entre cuatro y seis viajeros sentados frente a sí. Esta imagen se ha ido sustituyendo por la actual: car cross, buggies, quads...biplazas, conducidos por los propios clientes de la empresa organizadora y que se adentran por caminos y zonas del medio rural o incluso acceden a playas en lugares donde eso es posible (más por la existencia de ruta que de autorización).

Pero, insistimos ¿Es esto legal? En marzo de 2016 el entonces consejero de Política Territorial del Cabildo de Lanzarote, Marcos Bergaz, celebró un encuentro en el que estuvieron presentes, entre otros, representantes de empresas del sector, el Seprona de la Guardia Civil, concejales de Actividades Clasificadas y Medio Ambiente de varios ayuntamientos y técnicos de las áreas en el Cabildo. 

Las conclusiones de la cumbre no fueron demasiadas: "la gran parte de las empresas radicadas en Lanzarote, como las presentes en este encuentro, que prestan sus servicios de rutas o excursiones en quads o buggies, lo hacen con las licencias correspondientes al día, cumpliendo la normativa, no circulando por zonas prohibidas, ni agrícolas ni rurales y compartiendo la preocupación existente por los que no lo hacen y atentan contra el mantenimiento del paisaje y el entorno natural protegido, además de perjudicar a la imagen general de las empresas de este sector”, fue parte de la nota que remitió el Cabildo, que entonces presidía Pedro San Ginés, a los medios.

Un año después, el partido Somos presentó iniciativas en Teguise y San Bartolomé. Su naturaleza era "regular el uso de vehículos a motor, especialmente quads y buggies, en pistas y caminos de tierra del municipio" La moción solicitaba la iniciación de los trámites necesarios para la creación de una ordenanza "que ejerza un estricto control para evitar cualquier alteración medioambiental, especialmente en el suelo rústico protegido"

A juicio de la organización política, "dado el el incremento del número de excursiones en quad por pistas de tierra en el municipio, se hacía necesario que la administración local ejerciera sus competencias para  evitar así efectos negativos sobre la agricultura o el paisaje”.

Esta vez, además de la agricultura o el paisaje, hay que lamentar la pérdida de vidas humanas. Las excursiones off road quizá sean miradas ahora con una lupa de más calidad.

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