La tala indiscriminada de árboles y palmeras tiene los días contados
La futura ley obligará al inventariado y cuidado de todos los árboles y palmeras situados en suelo urbano en las Islas, impidiendo la tala indiscriminada.
La Proposición de Ley Canaria de Protección del Arbolado Urbano, nacida por iniciativa popular, recibió el apoyo unánime del Pleno del Parlamento de Canarias para iniciar su tramitación. La propuesta la defendió el portavoz de la promotora ciudadana a favor de esta ley, quien consideró necesaria la iniciativa “por la protección del paisaje de nuestras ciudades y pueblos, por el papel que juegan los árboles urbanos dando espacios a la ciudadanía para el recreo y ocio, por la biodiversidad que albergan o por el papel regulador de CO2”.
Arrecife cuenta con más de 6.000 árboles y palmeras
Según los promotores, se hace preciso adoptar medidas urgentes que garanticen la conservación de los ejemplares más valiosos y antiguos ante las agresivas actuaciones urbanas que muchas veces se producen, y asegurar con ello el fomento de los espacios arbolados en nuestros pueblos y ciudades. En Arrecife hay un árbol por cada diez residentes. La ciudad necesita multiplicar por tres el número de árboles para situarse en los niveles recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), según el inventario de los árboles del municipio. Este censo data de 2016 y arroja la presencia de 6.065 árboles y palmeras en Arrecife.
La organización ‘Parents For Future’ recogió 18.000 firmas que avalan la Iniciativa Legislativa Popular a favor de una Ley Canaria de Protección del Arbolado Urbano. Esta acción persigue proteger a los grandes árboles urbanos de Canarias dotando a los ayuntamientos de una herramienta legal para poner freno a las continuas talas. Para ello, obligará al inventariado y cuidado de todos los árboles situados en suelo urbano, impidiendo la tala indiscriminada de árboles y palmeras. Sólo en las dos grandes capitales canarias hay unos 100.000 mil grandes ejemplares que fijan anualmente alrededor de dos millones de toneladas de CO2.
La norma prohibirá la tala de los árboles protegidos
Los promotores de la Iniciativa Legislativa Popular recogieron firmas en las ocho islas del Archipiélago. Su texto es muy sencillo y consta de nueve artículos tan solo. La nueva ley protegerá a todos los ejemplares de cualquier especie arbórea ubicada en suelo urbano y que cuente con más de quince años de antigüedad o veinte centímetros de diámetro de tronco. En la mayoría de las ciudades europeas se considera a los árboles como un bien común de las urbes. Los árboles no sólo ornamentan las calles, sino que ayudan a la mejora de la salud física y mental de sus habitantes.
La norma prohíbe la tala de todos los árboles protegidos, salvo supuestos excepcionales contemplados en la misma. Así, cuando este arbolado se vea necesariamente afectado por obras de reparación o reforma o por la construcción de infraestructuras, se procederá a su trasplante. Del mismo modo, prohíbe la poda drástica o indiscriminada o extemporánea de todo árbol protegido, salvo en el caso de que no guarde las distancias a tendidos eléctricos o telefónicos previstas en la normativa vigente, dificulte o impida la visibilidad de semáforos y cuando exista algún peligro para la seguridad vial o peatonal o para la salud del árbol. Los propietarios del arbolado de cualquier categoría a los que afecta esta ley están obligados a su mantenimiento, conservación y mejora.
