Curso de jardinería para Ferrovial

Parecen intereses contrapuestos los de la empresa responsable de la de Jardinería del municipio de Arrecife y los de la propia ciudad. Muy bien no lo hacen. Y sólo espero que tras esta crítica, la empresa no pida la protección municipal para que defienda sus actuaciones, que como poco se pueden definir como extravagantes.
Ferrovial nació en los años 50 para realizar obras ferroviarias, para continuar con el paso de los años con carreteras, tratamiento de aguas, obras, aeropuertos, y con determinados servicios, todo de forma paulatina y con proyección internacional. A la vista del negocio que se abre con la privatización de determinados servicios por parte de los ayuntamientos de todo el país, ha ampliado su campo de acción para sacar beneficios con el mínimo esfuerzo. Más de un millón de euros factura anualmente al Ayuntamiento en labores de jardinería: en parterres agonizantes, sobre palmeras y árboles enfermos huérfanos de tratamiento, sobre plantaciones que no se hacen en nuevos emplazamientos, en la remoción de las rotondas —que es lo que más se ve— y en cortes salvajes y sin criterio sobre los escasos árboles de la ciudad.
Es probable que lo que hace la empresa con la jardinería lo resuelva infinitamente mejor el propio Ayuntamiento
En este escenario, que si nadie lo remedia se alargará hasta 2025, el Ayuntamiento hace como que mira para otra parte para no agraviar al concejal del área, Tomás Fajardo, poco apto para esta tarea de supervisión de la arbitrariedad de la empresa para con nuestro escaso capital verde. El PP no le tose ni opina del resultado de las competencias que tiene asignadas, y el PSOE le deja hacer por el agradecimiento a la estabilidad, que es como denominan a lo que permite que alguien que militaba en otro partido haya posibilitado tener el poder en algún mandato anterior. La bióloga responsable del cumplimiento del contrato debe ir a la par que el concejal, y con tal de no perturbar a la empresa, hasta les pide permiso y consejo, tal es el poder de tamaño gigante empresarial.
Es probable que lo que hace la empresa con la jardinería de la ciudad lo resuelva infinitamente mejor el propio Ayuntamiento creando un servicio propio de Parques y Jardines con unos pocos operarios No sólo emplearía personal auténticamente cualificado —que es lo que tendría que hacer— sino que reduciría los gastos y mejoraría la efectividad. Porque en la actualidad partimos con dos desventajas: Ferrovial cuenta con ingenieros que supuestamente supervisan lo que se hace y lo que se deja de hacer, y el Ayuntamiento no cuenta con personas cualificadas que fiscalicen la calidad del trabajo y los compromisos contractuales de la empresa para con la ciudad.
No se trata de despedir a nadie, sino de vigilar lo que ahora se hace deficientemente
Si al PSOE le importa algo este asunto del gobierno de la capital, y al PP le interesa la mejora efectiva de la percepción que los turistas y ciudadanos —en este orden— tienen sobre el espacio urbano, algo ha de cambiar. No se trata de despedir a nadie, sino de vigilar lo que ahora se hace deficientemente y lo que se está dejando de hacer. Si no les interesa echarle un ojo es porque no tienen personas capacitadas ni espíritus sensibles para con la naturaleza. Si ese fuera el caso, deberán buscar fuera del Ayuntamiento a quien les pueda echar una mano para redactar un manual de buenas prácticas de jardinería así como un plan de actuaciones para que al final del mandato el censo de árboles urbanos se multiplique exponencialmente. Porque con la dinámica actual, quitando unos árboles para, en el mejor de los casos poner otros en su lugar, en cuatro años estaremos igual o peor de deficitarios.