CRISIS DE LA PAPA

Autorizada la importación a Canarias de papas procedentes de Reino Unido

Papas de Los Valles, antes del alza de precios.
Papas de Los Valles, antes del alza de precios.
Se llevarán a cabo inspecciones en el 100 por cien de los envíos de papa procedentes de las Islas Británicas
Autorizada la importación a Canarias de papas procedentes de Reino Unido

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación vuelve a autorizar la importación de papas en Canarias procedentes de Reino Unido. No obstante, se llevarán a cabo inspecciones en el 100 por cien de los envíos.

Así lo ha anunciado este sábado el consejero canario del área, Narvay Quintero, quien ha explicado que el Estado "ha elaborado una instrucción en la que establece que se permite la entrada de este tubérculo de dicho país, salvo de Kent", condado donde se detectó el escarabajo de la papa o Leptinotarsa decemlineata.

"El Gobierno de Canarias carece de competencias en esta materia, sin embargo, junto al Gobierno de España y los productores hemos buscado soluciones a la escasez de papas con el fin de proteger a Canarias de la entrada de esta plaga y asegurar la próxima cosecha en las Islas y el suministro de este producto básico en la alimentación", ha afirmado Quintero.

Eliminación total de restos de tierra y de organismo nocivos

Las papas deberán someterse a un procedimiento de limpieza, mediante cepillado y/o lavado, que permita la eliminación total de restos de tierra y de organismo nocivos, y concreta que el porcentaje aceptable de tierra presente será del 0,5 por ciento. En el etiquetado deberá constar, además de los datos propios de la papa, la trazabilidad que permita identificar al productor y la parcela de producción.

Las papas de siembra deberán se ensacadas en sacos nuevos, con una capacidad máxima de 25 kilos, precintadas y etiquetadas en instalaciones habilitadas para ello, que garanticen la sanidad y trazabilidad de estas y bajo control oficial de las autoridades fitosanitarias correspondientes de las áreas de producción.

Las de consumo podrán presentarse en contenedores de 1,5 toneladas como máximo, que deberán ser precintados y etiquetados en instalaciones habilitadas para ello, que aseguren su sanidad y trazabilidad, e igualmente, estén controladas por las autoridades fitosanitarias de las zonas productoras.

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