El gran servicio del PSOE

Sirvan estas palabras que humildemente escribo para agradecer que el PSOE haya abierto por fin el debate de abstención sí o abstención no. Es una muestra de que algo está cambiando en el principal partido de la oposición tras la salida de Pedro Sánchez como Secretario General.

 

En ese sentido, la posibilidad de que el Partido Socialista se abstenga en una posible investidura de Mariano Rajoy sería sin duda un gran servicio a España, como lo hubiera hecho el Partido Popular si la situación hubiese sido al revés. Sí, sí..., como ya hemos demostrado en muchos lugares del territorio nacional como en el País Vasco, donde los votos del PP de Basagoiti sirvieron de apoyo a la investidura del Lendhakary, Paxi López, del Partido Socialista. No es el único ejemplo y también los hay más cercanos. Sin ir más lejos en islas como La Palma y como El Hierro, donde Alpidio Armas fue presidente del Cabildo herreño gracias a los votos del Partido Popular.

 

Lo cierto es que, con nuestros aciertos y errores, al Partido Popular no le ha dado complejo apoyar al PSOE en momentos trascendentales para la estabilidad política de un territorio, como en este caso lo necesita España.

 

Entiendo el enfado de la izquierda a que el centro derecha siga gobernando, como me disgustaría a mí que mi partido no esté en el gobierno; cosa lógica cuando nos presentamos para gobernar. Ahora bien, el PSOE debe entender que son realmente útiles, que son necesarios, que España requiere equilibrio y eso solo se conseguirá cuando, con perspectiva, veamos lo sucedido y analicemos que gracias a su abstención España pudo encarar la salida definitiva de la crisis, gracias a la amplia mayoría constitucionalista de nuestras Cortes Generales en las que desde luego incluyo además del PSOE a C´s.

 

Conozco la dificultad que este reto entraña para la familia socialista pero el PSOE ha atravesado por muchos momentos complicados en su historia y siempre, siempre,  ha salido fortalecido. Yo deseo un PSOE más fuerte, un PSOE de centro izquierda, moderado, con discursos claros, que defiendan sus ideas con igual criterio en todo el territorio nacional, y que se aleje de los cantos de sirena que se acercan por la izquierda populista y que solo pretenden engatusarlo para llevarlo al fondo del mar y diluirlo.

 

Como me dijo alguien al que tengo mucho aprecio una vez, la gente prefiere el original y no la copia,  y mucho me temo que el PSOE del pasado reciente era una mala copia de la izquierda radical. Lejos quedaba ese PSOE transformador de los años 80. Ahora creo que vuelvo a ver un PSOE más centrado, lejano a las tesis populistas y preocupado verdaderamente por los problemas del país y no por el ego de una sola persona. Sin duda alguna, Javier Fernández es otra cosa y está convencido de que el PSOE hará un gran servicio al país.