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Más de 200 colombófilos en Lanzarote: "​La base del éxito es la salud de nuestras palomas"

Francisco Arrocha y Diego Díaz, en el Magazine de Biosfera TV
¡Francisco Arrocha y Diego Díaz, en el Magazine de Biosfera TV
En Lanzarote existen clubes y entusiastas que entrenan palomas mensajeras. Es el caso de Francisco Arrocha y Diego Díaz, dos colombófilos que visitaron el Magazine de Biosfera TV 
Más de 200 colombófilos en Lanzarote: "​La base del éxito es la salud de nuestras palomas"

"Es injusto que nos metan a nosotros, los aficionados, como culpables de lo que provocan algunas palomas. Nosotros las tenemos controladas y cuidadas". La colombofilia​, que consiste en la cría y adiestramiento de palomas para convertirlas en palomas mensajeras, capaces de volver a su palomar, es una práctica muy presente en Lanzarote. Tradicionalmente, las palomas eran domesticadas para enviar mensajes de un lugar a otro. Esta fue su función durante siglos. Y aunque no todas tienen esta característica, muchas han sido criadas durante años para mejorar su capacidad de regreso.

En Lanzarote existen algunos clubes y entusiastas que educan y entrenan palomas mensajeras para competir en carreras y exhibiciones. De hecho, actualmente hay cinco clubes en la isla, con una media de 35 socios cada uno. Es el caso de Francisco Arrocha y Diego Díaz, dos colombófilos que visitaron el Magazine de Biosfera TV para hablar de esta afición. 

Esto es algo que se trabaja con mucho cariño y dedicación

De distintas generaciones, ambos mantienen esta pasión desde que eran muy pequeños. “Los días que tengo libres puedo pasármelos enteros en el palomar", reconoce Diego. “De pequeño incluso me fugaba de clases por estar y disfrutar de las palomas”, recuerda por su parte Francisco.

Según apuntaron en la entrevista, la capacidad de las palomas tiene que ver tanto con la genética, como con los entrenamientos que se realizan. Las competiciones de palomas mensajeras miden la velocidad y la precisión de las aves de un punto de origen a otro de destino, calculando el tiempo que tardan en regresar, y esto es algo que se trabaja "con mucho cariño y dedicación", señalan ambos.

"En los entrenamientos las vamos soltando de forma progresiva, poco a poco. No todas las palomas están igual en todo momento. Tenemos que fijarnos en cómo se encuentran, especialmente cuando tienen lugar las competiciones, para así acertar y soltar las correctas", explica Diego.

Una práctica que requiere tiempo

"Puedes tener las mejores palomas del mundo, pero, para poder competir, tienes que ponerle empeño y dedicar tiempo", explican los aficionados en el programa. Pero, ¿qué cosas definen a una “buena” paloma? Según comentan en la entrevista, existen muchísimos aspectos que las las diferencian, todos difíciles de apreciar. Los gestos, los puntos en las plumas e incluso la actitud de las propias aves.

La paloma de Lanzarote, según comentaron en el Magazine, está comprobado que es la mejor de Canarias, “incluso me atrevería a decir que la mejor de todo el mundo”, añaden.

Sobre la mala imagen que suelen dar estas aves, ambos explican que “no es culpa de estos animales”. “Es injusto que nos metan a nosotros, los aficionados, como culpables de lo que provocan algunas palomas. Nosotros las tenemos controladas. El problema son las mestizas, que crían y crían y van por todos lados”. De hecho, estas aves "conllevan un cuidado exquisito. La base del éxito para nosotros es la salud de las palomas”, cuentan ambos.

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