Nueva denuncia a pescadores furtivos pillados en la Reserva Marina de La Graciosa

La organización medioambiental canaria ADACIS ha presentado una nueva denuncia contra pescadores furtivos sorprendidos por la Guardia Civil cuando pescaban con fusil en la Reserva Marina Isla Graciosa e Islotes del Norte. La denuncia presentada es la tercera que ADACIS promueve para su resolución en los juzgados de Arrecife contra actividades de pesca furtiva en la isla, una de las cuales culminó con una sentencia condenatoria y otra se encuentra en curso tras año y medio de procedimiento.
La asociación conservacionista expresa en primer lugar el máximo reconocimiento a la actividad profesional de vigilancia y de intervenciones de la Guardia Civil para garantizar tanto el cumplimiento de la legalidad vigente como la conservación de los valores naturales marinos y costeros en Canarias. Subrayan que su labor ejemplar constituye un factor decisivo para evitar y reducir el expolio de recursos naturales por parte de pescadores furtivos, afectando negativamente al sector pesquero profesional, a la biodiversidad marina de las islas y, por tanto, al interés general. En esta ocasión, la denuncia de ADACIS se focaliza en primera instancia contra personas que pescaban ilegalmente con fusil en el entorno de los Islotes de Montaña Clara y del Roque del Oeste, espacios de alto valor ecológico en los que esta actividad está expresamente prohibida.
Insisten desde la Asociación en que la pesca furtiva debe ser perseguida y denunciada con la máxima contundencia por los efectos nocivos que ejerce sobre la vida marina y litoral y porque limitan de manera significativa, por su carácter clandestino, la capacidad de las administraciones para implementar una correcta evaluación del estado de ecosistemas y especies y del impacto de las actividades económicas asociadas a estos.
En este contexto, ADACIS solicita a las autoridades competentes un impulso firme y decisivo para reforzar la vigilancia efectiva en zonas marinas y costeras de Canarias, particularmente en las áreas protegidas, y promover una labor educativa más intensa que permita a la población conocer la normativa vigente, las zonas críticas, y las especies protegidas y en peligro de extinción. Además, aseguran que es prioritario establecer una actualización de las tallas mínimas para todas las especies de interés pesquero, e incrementar con urgencia los esfuerzos para alcanzar el objetivo europeo de proteger el 30% del espacio marino de la demarcación canaria en 2030.
ADACIS incide en que “la actividad pesquera no puede ni debe ejercerse nunca mediante prácticas que destruyan o degraden la naturaleza canaria, y debe efectuarse en todo momento debidamente controlada y registrada. Mientras los pescadores profesionales y recreativos están obligados a cumplir las normas respetando las tallas, las especies y los periodos y zonas habilitadas para la actividad extractiva, los furtivos roban el pescado para lucrarse vulnerando los preceptos legales y atentando contra un patrimonio natural que pertenece a toda la población canaria. ADACIS ampliará en los tribunales de justicia la exigencia de responsabilidades a pescadores furtivos, pero también a personas y establecimientos que compren capturas ilegales procedentes de la pesca furtiva o de la pesca recreativa